D.O. Penedés prevé una buena cosecha en 2018
El calor de los meses de verano junto con la marcada bajada de temperatura que tuvo lugar durante el pasado mes, hace que se de la combinación perfecta para permitir que la maduración de las variedades de uva se de forma ordenada.
Los bodegueros no pueden negar que este año la vendimia va a estar mejor repartida y que las distintas variedades van a terminar de forma correcta las maduraciones. Ello supondrá que la vendimia del 2018 alcanzará una buena acidez y los vinos, probablemente, serán más aromáticos que otros años.
La lluvia primaveral supuso el aumento de tratamientos fungicidas, pero por fortuna, no hay que lamentar muchos daños sino justo lo contrario. A pesar de la presencia del mildiu, las bodegas no tienen que lamentar grandes pérdidas. No hay que olvidar que el agua de lluvia es lo que realmente necesitan las cepas para poder evolucionar y desarrollarse.
La D.O. Penedés piensa que la vendimia terminará a mediados del mes de octubre con la Parellada, que es una de las variedades más tardías.