DEG 09/12

Bebérselo mirando a los navazos. El mar (https://www.verema.com/vinos/106788-colet-navazos-reserva-extra-brut-2009/valoraciones/1306931-colet-navazos-reserva-extra-brut-2009) a la espalda.

... Y que conste que ese perfil marcadamente "sureño" de añadas precedentes se mantiene en segundo plano... Aunque es cierto que las huellas de la "flor" se perciben mucho más que en mi cata previa.... La chardonnay se expresa franca y generosa en fruta.... En boca lo tiene todo, fresco, cremoso, atractivo... Un espumoso para disfrutar con su justo toque de complejidad....

Color amarillo pálido, reflejos oro, limpio, brillante, burbuja fina.
En nariz destacan aromas de manzana verde, cítricos, tierra mojada, leves toques de pan tostado.
En boca es fresco, perfecta acidez, buenas sensaciones de carbónico bien integrado con la presencia de manzana verde y cítricos maduros, sensaciones frutales y minerales. Persistencia media.

En espumoso valiente que cruzó del lado oscuro (cava) para lucir fachada.

El antes notable carácter oxidativo ha mutado en un trago suave, quizá un punto menos que cremoso, y que lo hace un espumoso de lo más agradable.

Amarillo pálido, limpio, brillante y con una burbuja pequeña.
Nariz limpia y directa con unos matices muy primarios a manzana verde, uva blanca y cítricos. Después encontramos tierra mojada, tonos metálicos, humedad y piedras. Hemos echado algo en falta ese carácter oxidativo tan presente en 2008 y 2007.
Boca fresca, con esqueleto femenino y grácil y mucha acidez. Poca barrica, poco alcohol y carbónico perfectamente integrado. Trago largo que deja sensaciones frutales y minerales, aquí notamos algo más los matices ajerezados aunque tampoco son muy intensos.
Final de longitud media.
Un espumoso siempre fiable por su amargor y su sequedad. Irá creciendo en botella, lo malo es que no me quedan más.

Pues me reitero en mi opinión previa... que conste que el vino muestra ahora un perfil algo más maduro, destaca más la fruta compotada pero mantiene los toques más frescos de manzana Fuji o fruta con hueso. La bollería y los frutos secos en el fondo completan un perfil variado y atractivo. En boca con buen ataque, cierta cremosidad, buena acidez, notable longitud y atractiva definición.

mínima calificación, notable.

Color amarillo claro con toques brillantes.

Aromas de intensidad media-alta a citricos dulces en primer plano, frutos blancos y amarillos, frutos secos, flores, vainilla y toques de tostados, bastante bien la complejidad en nariz.

En boca es frutal y fresco, el paso de boca con buen equilibrio, aunque necesita tiempo en botella, rezuma juventud, acidez y fruta, el final no es muy largo, pero tiene buenos toques especidos y frutosos.

Otro gran acierto de la "factoria" Colet-Navazos, que seguro que con el tiempo, y no creo ue necesite más de un año, se hara un vino sobresaliente.

Bueno, pues lo cierto es que me ha parecido detectar un cambio de estilo... el seductor carácter oxidativo que adornaba el vino en añadas precedentes lo he encontrado algo difuminado y tal vez he encontrado algo más de fruta fresca, a los toques de fruta blanca compotada y de fruta con hueso madura, se le suman notas más frescos de manzana Fuji o los de melocotón de viña. Toques florales, de bollería fina y algo de frutos secos completan el perfil En boca tiene buen ataque, pasa fluido pese a la cremosidad que se deriva de la buena integración del carbónico, carbónicos muy ligeros, largo y atractivo.

Dorado pálido limpio y brillante, burbuja pequeña y abundante.
En nariz no es muy intenso y destaca por su frescura y carácter primario, estos vinos necesitan algo más de botella para ir desarrollando. Notas florales, fruta madura de hueso, bollería, especias, un ligero tono oxidativo, siempre destilando limpieza y definición.
En boca es fresco y directo, destacando por su acidez y su paso firme y elegante, fino y con una burbuja perfectamente integrada que contribuye a una sensación cremosa. Muy versátil en la mesa por su ligereza y su capacidad para limpiar la boca. Final de fruta amarga. Se bebe de maravilla.
Creo que estos Colet-Navazos van mejorando cada año y son vinos para beber sin pensar y que resultan auténticos comodines en la mesa. Este 2009 está ahora un poco joven, en unos meses más irá desarrollando matices, pero resulta una delicia por su balance. Veremos el Reserva, siempre un punto superior, lo cierto es que este año promete.