Hoy tenemos entre manos este monovarietal malbec argentino con 15 meses de crianza en barricas del cual tenemos buenas referencias. Conseguimos un par de botellas en oferta en una feria de vinos justo bajo de mi casa. Abrimos la botella y dejamos respirar por espacio de 45 minutos. Servimos a 17.5°C.

VISUAL: Rojo picota de capa alta, opaco, brillante, con un ribete morado y estrecho. Lágrima fina, abundante y tintada. Espectacular su color (96).

OLFATIVA: A copa parada emana intensos aromas tostados y también a fruta negra muy madura (higos secos). Al agitar encontramos fragancias florales de violeta, especiados a pimienta negra, herbáceos de té negro, algo de regaliz de palo, así como una buena pátina terciaria en donde aparecen recuerdos de puro habano, cacao en polvo y duelas envinadas. También se percibe un fondo mineral como de tinta china. Buen bouquet, de intensidad media-alta y bastante complejo (93).

GUSTATIVA: En boca resulta muy sabroso, con cuerpo, de acidez alta y con los taninos marcados y muy bien esculpidos proporcionando una base sólida a su estructura. Bastante amplio, con un paso por boca seco, ligeramente astringente, que da paso a un retronasal floral con sutiles notas minerales. Post-gusto muy rico, apareciendo la fruta junto con las notas tostadas  y amaderadas. Persistencia de dos minutos y 40 segundos. Nada mal este Malbec, corpulento y muy aromático. Le veo mucho recorrido y por suerte nos queda otra botella para abrir en unos años y apreciar su evolución (91).

La RCP la dejaremos en correcta. Nos costó 28 USD en oferta y su precio habitual en Ecuador es de 42 USD, lo cual es una rebaja tremenda aunque por otro lado en España lo veo en alguna web por unos 25 USD al cambio (22.78 euros). Pese a ser un malbec sobresaliente quizás el precio está en el límite superior de lo que vale..

MARIDAJE: Nos lo tomamos en tres tandas. Con un solomillo de cerdo con masala casero y arrocito con setas, con un surtido de jamón, embutidos ibéricos y queso curado y por último con un solomillo de ternera macerado en mermelada de moras con romero, nuez moscada y sus alcachofitas. Destacar el maridaje con ese solomillito macerado, notas frutales y especiadas en ambos lados en absoluta armonía y mágica la combinación de apuntes tostados y cárnicos... qué delicia amigos!!

Salud-os!!