Color rojo picota con ribete frambuesa y nariz sugerente con unas curiosas notas de pimentón, de fruta roja, pimienta negra, notas florales y un tostado ligero. En boca tiene una buena acidez, con un buen peso de fruta, cremoso, tacto glicérico con un fondo lácteo y un largo recorrido.

Visualmente tiene un bonito color rojo guinda muy brillante.
Aromáticamente es exuberante, con golosinas de fruta roja ácida y dulces de regaliz rojo.
En boca se muestra largo y estructurado, con un paso lento que regala regaliz rojo al paso.
Una excelente elección teniendo en cuenta su imbatible precio de menos de 8€

Botella bordelesa estándar. Cápsula azul marino oscuro y etiquetado bastante estándar aunque con bastante información sobre la elaboración del vino. Corcho de longitud media para un crianza riojano que, eso sí, estaba ya bañado hasta un tercio del mismo (razonable pero bastante para llevar menos de 3 años embotellado, otros vinos con ese tiempo, están muy poco bañados).

Catado con hora y media descorchado y sostenido a 16-18ºC con jarra térmica.

Visual: rojo cereza-rubí de capa media, limpio, brillante y con buena lágrima de lenta caída. Ribete granate-transparente con ligeros destellos entre azulados y anaranjados (denota cierta juventud del vino pero con una estancia en barrica relativamente larga).

Nariz: frutos rojos y negros maduros, predominando los negros que tienden ya a licorosos (sobre todo si se toma el vino a 17-18ºC), regaliz, especias dulces, clavo, regaliz, balsámico-mentolados potentes (mentol), flores violetas, ahumados finos, cacao, toffee, tostados, algo de chocolate, laurel, monte bajo, tabaco rubio, caja de puros, algunos herbáceos de monte y toques vegetales junto a una buena dosis de mineralidad. Bastante compleja la nariz si se le da tiempo (si no, los aromas serían bastantes menos).

Boca: entrada fresca, sabrosa, de buena acidez, con bastante fruta roja todavía, mucho más directa y vertical que la nariz (algo menos compleja la boca) aunque, termina siendo ligeramente expansiva al final. El tanino aún se pega ligeramente a las mucosas pero está bien trabajado y es agradable dentro de su ligero verdor. Se percibe una acidez elevada para un tinto de estas características. El final es largo, sabroso, con tanino, acidez, un poco de mineralidad, fruta roja y, en retronasal tostados, tabaco rubio, monte bajo, ligero toffee y, sobre todo, toques herbáceos y aromas minerales y vegetales.

Un vino todoterreno: soporta perfectamente un plato de consistencia media-alta y con grasa (dada su acidez que limpia la boca), pero por su frescura y ligereza, soporta también muy bien casi cualquier aperitivo, chateo y tapeo en barra perfectamente. Excelente vino para el día a día de excelente RCP para su tipología (Crianza riojano). Su PVP ronda los 5-7€ según la tienda (lo he visto por 4.98€ y por algo menos de 8€),... en cualquier caso, la RCP es muy buena. Podría aguantar perfectamente (por su acidez), 4-5 años más (parece ligero pero creo que podrá beberse bien con 9-10 años sin problemas).

Color cereza rubi claro.

Aromas de buena intensidad donde destacan los frutos de varios tipos con muy buena madurez, flores, vainilla, tostados y toques de balsámnicos y monte bajo, buena la complejidad de la nairz.

En boca vuelve a ser frutal y fresco, el paso de boca equilibrado y redondeado, quizas demasiado para ser un 2011, bastante viveza que le da el toque de graciano y garnacha, buena estructura y final con buena persistencia.

Un muy rico vino que se bebe con placer y con un bajo coste. El corcho bastante bien para el segmento del vino un 6,7. La RCP me ha salido de muy buena a excelente.