Los vinos de Italia (I)
Italia, no cabe duda, es uno de los países con mayor importancia en el panorama vitícola internacional. No en vano es el principal productor mundial de vino con una media aproximada de 65.000.000 Hectolitros de vino. Sus viñas ocupan entorno al millón de hectáreas, lo que le otorga el segundo lugar después de nuestro país (España) en terreno cultivado.
Las "aziendas" se caracterizan por estar en manos de pequeños viticultores que, a las ordenes de los "consorzios", realizan las prácticas de viticultura adecuadas .
Los cultivos en la zona norte del país son asociados a sistemas de conducción en espaldera con elevadas densidades y podas largas (Guyot, Lira, Cordón Royal etc...). En las zonas mas septentrionales se llega a los emparrados con el objetivo de alcanzar los máximos de exposición solar dado la latitud en la que se encuentran las principales zonas de calidad del viñedo Italiano y la dificultad de maduración de las bayas. Condicionado todo esto por los terrenos, muy fértiles, aunque con un buen equilibrio arcillo/caliza que, además, no carecen de aportes hídricos que reciben en cantidad de las lluvias, bastante copiosas.
Los rendimientos por Ha de viñedo rondan los 10.000 Kg. Los mostos obtenidos son bastante ricos en ácidos y, en ocasiones, carecen de la suficiente glucosa y fructosa y recurren a la chaptalización para sus vinos de mesa ya que su país lo permite, aunque en vinos de calidad no es común.
Por lo que respecta al consumo de vino, Italia el segundo en el ranking con 70,8 litros persona/ año; Francia es el primero con 73,3 litros, mientras que España no llega a los 45 litros (¡por mi parte no será!) .
En lo que si tendríamos que tomar ejemplo es en la política comercial de promoción exterior que Italia vine llevando a cabo en este mercado cada día mas globalizado como es el del vino. Italia cuenta con la mejor red de distribución, lo que permite llevar sus vinos a todos los rincones del mundo.
Por otra parte, Italia no ha dispuesto de reglamentación a nivel general sobre Denominaciones de Origen hasta 1.963 en que se definen las D.O. simples (D.O.), las D.O. controladas (D.O.C.), y las D.O. Controladas y garantizadas (D.O.C.G.).
La ley de 10 febrero de 1992, que es la vigente, perfeccionó el régimen y la disciplina sobre las Denominaciones de Origen de vinos quedando de la siguiente forma:
- VINO DA TAVOLA. Equiparables a los Vinos de Mesa.
- IGT (Indicazioni Geografiche Tipiche). Los comparamos con los Vinos de la Tierra, aunque, eso sí, en sus etiquetas pueden utilizar las variedades de uva que componen sus vinos y la zona geográfica exacta de donde proceden
- DOC (Denominazione di Origine Controllata). Son las DO de nuestro país.
- DOCG (Denominazione di Origine Controllata e Garantita). Máximo exponente de calidad legislativo de los vinos Italianos.
Italia cuenta en este momento con más de 250 DOC en vinos, y 21 DOCG. Ambas ocupan el 13% del viñedo y la IGT un 22%.
En cuanto al nombre de las DO, a diferencia de España, pueden utilizar el nombre geográfico de la región o el nombre de la variedad de uva con la cual se elabora el vino y su lugar de procedencia, lo que puede crear cierta dificultad para el consumidor no acostumbrado a tal circunstancia y tan elevado número de nombres geográficos y de uvas para vino.
Al mismo tiempo, un mismo viñedo puede estar registrado en varias DOC con zonas de producción coincidentes o solapadas y con las mismas variedades de vid, pudiendo acogerse el vino a una u otra según las circunstancias de producción máxima por ha., grado alcohólico natural, y posiblemente por circunstancias del mercado.
Las DO funcionan en cascada. El producto que no cumple la totalidad de los requisitos para ser DOCG pueden comercializarse como DOIC, si cumple las condiciones, y, si no es así, puede bajar al estadio inferior de IGT, siempre que por la delimitación geográfica y características del viñedo y del producto sea compatible dicha traslación
En una próxima crónica profundizaremos en el análisis de las principales DO Italianas.