A la vista se muestra con un color amarillo pajizo, con los ribetes y destellos con un tono ligeramente verdoso. Bien limpio y brillante y con una lagrima bastante densa para tratarse de un vino blanco.

En la nariz se muestra con una intensidad de tipo media, con muchos detalles tanto de fruta como de flores, que tardan en ir apareciendo, se puede desgranar la aparición de fruta de tipo hueso, algo de manzana y detalles de cítricos.

En el paso por la boca, se muestra de fácil de beber, sin mucha untuosidad esperada por la godello, con una acidez ya justa y sin dar mucha sensación tampoco de frescura. Fase final a de longitud media y sin ser muy expresiva.

Etiqueta sencilla blanca de fondo y sin mucha información.

Esperaba bastante más de este vino.

Después de tomar varios Ribeiros, para cenar decidimos cambiarnos a Monterrei, así que optamos por este Alanda 2010.

El vino es de color amarillo pajizo ya ligeramente dorado. Tiene una lágrima densa y lenta. Limpio y brillante.

En nariz se nota la maduración de la fruta, es ligeramente cálido. Mucha fruta de hueso madura.

En boca el vino es glicérico, untuoso. Toda la calidez en nariz se transforma en una muy buena acidez, fresco.

José Luis Mateo es uno de los mejores elaboradores de Galicia, tanto por la cantidad de sus vinos como por la calidad de los mismos.

Vino amarillo pajizo con ribete levemente dorado, limpio, brillante, transparente y lágrima abundante y densa.
En nariz con intensidad media, notas de fruta con hueso blanca, peras y manzanas apunto de madurar, con un sauve y elegante toque vegetal, pequeños toques de regaliz que desaparecen rapidamente.
El paso por boca, suave, untuoso, glicerido, afrutado, fresco, expresivo, buena acidez, equilibrado, mineral y final cítrico y refrescante, limón.
Retronasal, fruta vegetal.
Posgusto, largo y muy bueno.