Color picota de buena capa.

Nariz de buena intensidad tras aireación. Muestra buen ensamblaje de su crianza, notas de fruta roja y negra en sazón, pimienta negra, vainilla, tostados, ahumados, ligeros lácteos y fondo mineral.

En boca tiene buena entrada, tacto sedoso, muy buena acidez que conforma el esqueleto del vino, fresco, elegante, estructurado, potente, amplio, tanino presente ligeramente secante, amargoso y muy largo. Retrogusto complejo lleno de matices.

Un vino con mucho potencial que ya se bebe bien y en el que la crianza está en fase de integración.

Vamos con este vinito riojano que nos vino en una caja de Navidad junto a un rico jamón ibérico. Sacamos la botella de nuestra vinoteca, la abrimos y esperamos unos 30 minutos antes de proceder con su valoración a 17°C. Buen tapón, de longitud media, muy compacto y tintado 1 mm desde su base.

VISUAL: Precioso color rojo picota de capa alta con un estrecho ribete en tonalidades cardenalicias. Su lágrima es abundante, gruesa y transparente (95).

OLFATIVA: En primer término apreciamos aromas de fruta fresca, moras, grosellas y arándanos. Al agitar asoman notas tostaditas de la barrica con apuntes herbáceas de té negro y un toquecito especiado de clavo y pimienta negra. También hay recuerdos minerales de tinta china y aportes terciarios de chocolate negro y cuero curtido. De fondo hay más tostados de nuevo, bastante protagonistas. Su intensidad es media-alta (90).

GUSTATIVA: Ataque brutal, vino muy carnoso, de alta extracción y con los taninos marcados, un pelín verdes aún. Alta acidez y de gran amplitud, con un paso por boca astringente y corpulento. Retronasal con notas tostadas una vez más, con un post-gusto licoroso a duelas envinadas y guindas en licor. Ahora aparecen unos curiosos apuntes animales, cárnicos y sanguíneos que le dotan de una peculiar personalidad. De alta extracción, quizás algo forzada, muy parkerizado. El 14.5% de alcohol remata el conjunto mostrándose como un vino "cañerito" y que necesita botella claramente. Nos dio una persistencia de dos minutos y 50 segundos. Hay que darle al menos 4 o 5 añitos para que se redondee (86).

La RCP no la puntúo por tratarse de un regalo.

MARIDAJE: Nos lo tomamos chateando cuando lo abrimos y posteriormente nos lo terminamos acompañando un solomillito de cerdo con patatas fritas. La verdad... demasiada potencia para el solomillito, tiene un poderío brutal este Fos Baranda. Pero bueno, muy disfrutable igualmente.

Salud-os!!

Color picota, con ribetes todavía algo morados.

En boca despliega tanto fruta roja como negra. Ahumados y tostados. Finos balsámicos (regaliz). Notas de ceniza y tabaco, junto con algún toque lácteo. Aromas profundos, ligeramente fenolado, con un fondo de bosque.

La boca es fresca, con buena acidez y carga frutal franca. Refuerza el carácter balsámico, con taninos presentes pero golosos. Sin aristas

De capa muy alta, color rojo picota con matiz granate y reminiscencias moradas. Tinta la copa

Nariz con buena intensidad en la que predominan en un principio las notas de barrica, tostados, licor, torrefactos, regaliz, vainilla. La fruta es sobretodo negra, arándano y ciruela. Notas balsámicas de resina. 

En boca el tanino es fundente, hay cuerpo, equilibrio, sabor, frescura. Buena evolución, post largo y excelente recuerdo

Color rojo cereza picota de capa alta y ribete granate, tiñe la copa.

Inicia el recital con unos claros aromas del tostado, café torrefacto y regaliz. Tramados con una fruta densa, madura y por momentos confitada. Hay arándanos y grosellas. La fruta en estos momentos se siente algo tímida frente a las notas de la crianza. Punto balsámico y especiado, cedro y pimienta.

En boca su paso es rápido y fluido, gusta y sabe. Buen equilibrio de fuerzas, quizás algo más que en nariz. Se siente la fruta y la rica crianza, el tanino está redondo y la acidez le dota de fluidez y frescura. Se deja beber aunque presagia una buena evolución y alcanzara notas más complejas, tiempo al tiempo.

Recuerdo el Baranda 2012 como un buen vino quizás un poco maduro y con mucha extracción aquí se nota cambio de rumbo
Color púrpura con ribetes violáceos, denota juventud y fruta ya por los ojos, también se nota el cuerpo y estructura.
En nariz intensidad alta de frutos rojos, mineral y un sinfín de especias muy equilibradas, con aireación resalta más si cabe la frescura de la fruta.
En boca es redondo untuoso pero con una acidez y taninos que lo hacen más vivo e interesante

Vino tinto de color rojo picota, capa alta-muy alta y ribete morado. En nariz salen recuerdos de mora madura, notas de regaliz, Juanola, tabaco y un punto lácteo muy presente. En boca es un vino muy equilibrado, todo está en su lugar... tiene una acidez bien integrada y un tanino sedoso y algo amargoso. Tiene un retrogusto balsámico, complejo con recuerdos de resina. Pese a ser un vino muy interesante para tomarlo ya, yo lo guardaría unos cuantos años... tiene potencial!