Color granate intenso de ribete anaranjado de capa media baja

Intensidad media, toques de fruta negra, ciruelas, muy sutil en nariz, expresivo, toques leves terciarios de flor seca, caza, balsámicos, regaliz marcado, al mover aparece anticuario

Boca suave, estructura frutal, perfil licoroso, sensación plena de vino, estructura frutal, largo, acidez viva, fruto rojo, vainilla y mentoles, cueros, final largo y con mucho recorrido todavía, sedoso, untuoso y de final licoroso, vino muy vivo, grandioso. Con potencial de guarda.

rojo granate de rivbete atejado, capa media, limpio y brillante aunque presenta algún sedimento la botella.

intensidad media, notas de fruta negra madura y licorosa, complejo, toques de vainilla, toffe, tabaco de puros y chocolates que dan paso con el tiempo a notas de caza y más profundidad.

boca suave de perfecta acidez y equilibrio, muy sedoso y con volumen, de fácil trago y recuerdo, de tanino domado y disfrute pleno.

Me ha gustado mucho y esta en concordancia con la línea de la casa.

Rojo rubí, ribete atejado, capa media-alta.
Nariz con buena intensidad y expresiva desde un primer momento, inconfundible por su estilo. Notas de frutas rojas en licor, un fondo especiado y balsámico, tabaco de pipa, trazas terciarias de piel curtida y humedades, humus, hojarasca, toques igualmente de regalices, ahumados y viejas maderas. Muy clásico.
En boca es un vino redondo y equilibrado, en perfecto momento de consumo, sostenido por una magnífica acidez y con un paso fino y armónico, dejando sensaciones de frutas en licor y especias en el final con un tanino perfectamente fundido en un conjunto encantador. Buena persistencia.
Cuando abres un GR 904 con algunos años sabes que vas a beber un buen vino tradicional de Rioja y en este año 94 se muestra en forma y con buenas maneras, francamente armónico y delicioso, en su momento ideal de consumo, aunque no lo dejaríamos mucho más tiempo. Un vino que siempre resulta un placer degustar.

Y es que todo lo que he probado del 94 en la zona me ha encantado.
No voy a extenderme en el comentario pues ya hay bastantes y varios de ellos son recientes. El vino está jovencísimo, coincido con Limonero, en que se mantiene sólido como una roca. La nariz es intensa y compleja, con multitud de matices y claros atisbos terciarios. A la boca hay que dejarla respirar, pues comienza algo austera. El paso evidencia su estilo y lugar de procedencia: fruta, sobre todo negra, madera vieja marcada, tabacos, cuero y mineralidad. Excelente acidez, tanino maduro pero en absoluto caído, poca presencia alcohólica. Final con recuerdos dulces.
Pues eso, que me he precipitado al abrirlo, que a este 904 le quedan muchos años por delante.

Color rojo rubí de capa media, con reflejos anaranjados y ribete yodado, brillante y limpio, bonito.

Potente y con complejidad en nariz, hoja de habano, madera de calidad (cedro), especiados (pimienta, clavo), cuero, toques torrefactados de gran calidad, muy elegante, fruta negra y roja bien presente.

En boca se repite esa complejidad, muy potente y estructurado, mostrando una acidez muy bien compensada, intenso, fino, elegantísimo, con toques de regaliz y cuero y un final larguísimo y de gran frescura.

Un vino excelente que se bebe fenomenalmente bien y al que aún le queda cuerda para rato.

De color rubí rojizo de capa media, brillante, muy limpio, reflejos anaranjados y cobrizos. Borde amplio, claro, con marcada diferencia con el menisco.

Complejo, abierto y muy serio en nariz. Repleto de aromas de cedro, maderas de calidad, cava de puros, tabaco rubio y unos tostados finos, casi cremosos, que van dando paso a notas aromáticas de café recién molido, cuero viejo, con un fondo licoroso a ciruelas maceradas y picotas maduras. Perfumado, elegante, directo, lleno de apuntes especiados que van ganando en presencia al respirar, laurel en polvo, clavo, pimienta negra, hierbas aromáticas y un deje fragante a flores marchitas. Un 904 de gran entereza, potente, lleno de vida que no se viene abajo a pesar de las horas abierto.

En boca es fresco, de medio cuerpo y taninos sedosos pero vivos. Acídulo, térreo, algo cítrico, con un apunte especiado y una extraordinaria acidez. Larguísimo, sobrado de fuerza y energía. Tiene un perfil menos clásicos que otras añadas precedentes y tendrá que ir desarrollándose todavía en botella.

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2013/08/la-rioja-alta-904-gran-reserva-1994.html

Clasico Tinto Riojano por excelencia del Barrio de la Estación. En copa muestra un color rojo rubi con ribetes tejas de capa media. En nariz aparecen notas del largas crianzas (maderas, cueros, algo de champiñon). En boca destaca su magnifica acidez, elegancia, sedosidad es un vino que anima a beber.

Coincido con Benjamin. Un vino elegante, con una sedosidad en boca que invita a no parar de beber, complejo en la nariz, con aromas a hojas secas, ahumados, ligeros aromas a cueros, fruta madura, balsámicos. repitiendo esa complejidad en las sensaciones que deja a su paso por el paladar, largo en el postgusto. Delicioso. Abierto al mediodía...y a última hora de la tarde seguía diciendo cosas bonitas.

En su etiqueta aparece "primer centenario" 1904-2004, cosecha 1994.
Color evolucionado hacia ocres. En boca es toda sedosidad y equilibrio, con buena fruta y excelente acidez, muy complejo, abre a cada momento con nuevas sensaciones.

Rojo atejado.
maderas viejas,especiado,cueros.
suave,sedoso,amable.