Mi título es la añada porque no deja de sorprenderme.. No acabo de entender la razón , por la que la añada en mercado más reciente de este vino mítico es 2007, 14 años , 14 de Somontano , que no suele ser precisamente la D.O. que mejor soporta el paso del tiempo . Es debido a la venta de la bodega?'. Otra estrategia?. No resultaría más lógico sacar ahora 2015, 2016??. La cuestión es que este 2007 ( que no había comprado antes pensando que sería una añada atrasada o demasiado vieja), no está nada mal , pero tan evolucionado ..Nos han privado de su frescura y excelencia frutal y también de poder observar su evolución si lo deseas. En cualquier caso este Marboré en su evolución resulta licoroso, fruta pasa, , terciarios, algo de Brett, pero muy sugerente , un buen vino en nariz. En boca su sedosidad e integración es excelente. La fruta algo caída, pero su paso es elegante y delicado. En fin un buen vino , evolucionado , pero seguramente no en su mejor momento , aunque no sea malo..

Después de 7 meses sigue estupendo, sugerente en nariz con sus aromas a habitación cerrada, tinta china y compotados.

En boca para nada se le notan los 12 años, sabroso y equilibrado, largo posgusto.

A ver si consigo alguna botella más porque vale la pena seguir su evolución.

Reconozco que la venta de bodegas emblemáticas del Somontano me causó mucho malestar, entre esto y la crisis yo creo que esta para mí entrañable D.O. sufrió un gran varapalo. Lástima porque había conseguido un lugar destacado en la carta de los mejores restoranes del país y podías pedir caldos oscenses prácticamente en cualquier lugar de España. En fin, lo pasado pasado.

Pedí este Marboré con un poco de prevención por ser del 2007, cansado de vinos que llegan ya en franca decadencia, pero me quedé gratísimamente sorprendido.

Botella bordelesa, etiqueta en mi opinión muy poco atractiva, contraetiqueta con información de varietales, tiempo de crianza y temperatura recomendada de consumo.

Color rojo granate oscuro, capa alta, lágrima abundante, menisco todavía muy lila.

Nariz fragante y sugerente: fruta roja, tinta china, especies dulces.

En boca es dulzón, sabroso y profundo, con presencia destacada de la fruta madura y confitada. Largo posgusto.

Está ya muy bueno y todavía tiene, creo yo, mucho futuro por delante.

Nos gustó tanto que al día siguiente repetimos, en carta de restaurante 28€, en tienda 17,90€.