Este no es un vino clásico de Toro pero es un gran ejemplo de lo que se puede hacer con la Tinta de Toro.

Se presenta con un color rojo picota oscuro de capa alta, ribete ya tirando a granate y lágrima densa que tiñe la copa.

En nariz empieza un poco cerrado con notas balsámicas, clavo y especias dulces. Poco a poco la fruta lo inunda todo, fruta roja muy madura, tostados muy finos y cacao sobre un fondo de tierra mojada.

En boca es potente pero agradable, afrutado, balsámico, taninos maduros pero aún vivos. Paso de boca muy agradable a pesar de la alta graduación y un largo final con toques amargos que dejan un recuerdo terroso.

Como siempre uno de los vinazos de Toro.

De Anthony Terrin el vigneron de Toro se ha dicho practicamente todo, y lo versado siempre son halagos a su trabajo, gracias en gran parte al magnífico Tintán del Bendito. En esta ocasión no engrosaré mas páginas sobre Titán, ni tan siquiera sobre sus dos inquietos y sorpresivos dulces (La chis Negra y Antojo Rubio), lo haré sobre el vino que soporta en precio y cantidad a cualquier bodega, su “crianza”.

Realmente la añada 2008 una auténtica sorpresa, por su agilidad para evolucionar en copa, por su equilibrio y ¡que leches! Porque está muy, muy rico. Hablo de un vino que rezuma aromas en perfecta conjunción de finos cacaos, trufa y tinta china, sobre su esencia de fruta negra y un fondo de matorral que distingue a esta variedad. Excelente acidez, fresco, firme en su estructura tánica, un vino pulido que nos ofrece nobleza, abriendo paso a un punto final de acetona que lo distingue y lo hace grande.

Si usted agradeció la existencia de titán del bendito le aseguro que añorará no tener más botellas de este crianza, al menos en su añada 2008.

Tremendamente frutal en nariz, maderas cremosas y avainilladas bien integradas y de calidad, tierra, cálido. Boca poderosa, carnosa, paso largo y equilibrado, caluroso. Magnífico y característico Toro

Vino color ciruela madura con ribete purpura, bien cubierto y lágrima ligeramente tintada.
En nariz se muestra, balsamico, cedro, toffe, confitura de frambuesa.
En boca soberbio, corpulento, carnoso, frutal, buena acidez, con unos taninos que estando presentes lejos de molestar realzan.
Muy bueno este toro.
Retronasal, fruta madura
Posgusto, laro y bueno.

Vino corpulento de color picota. Lágrima que tinta la copa.
En nariz aparecen notas de fruta muy madura, roja y negra, toques minerales sutiles en el fondo, tostados de la barrica, regaliza y algunas notas de tierra.
En boca es agradable, de amplio paso, taninos presentes cada vez más integrados. potente, amplio, y con un gran final largo y complejo. Fruta roja, negra, regaliz, toques minerales.

Muy agradable, como siempre.

Antony Terryn - Vigneron en Toro demuestra su maestría en la elaboración, aunque también su visión, cuando adquirió estos viñedos viejos en Toro.

Un vino potente, fresco y frutal, un tinto agradecido ante un buen maridaje que se deja disfrutar al igual para culminar la sobremesa. Sus aromas confieren a Dominio del Bendito 2006 el adjetivo de atractivo, resultando frutoso, fresco y vinoso. Aparecen notas ácidas de fresas bien engarzadas con fruta compotada con ligera sensación de almibar. La oxigenación tras el movimiento de la copa produce un cambio cualitativo, aparecen notas de polvora, cacaos y ligeros apuntes que recuerdan al yogouth de fresa. En boca su frescura y acidez son destacables, sensación de pimienta en su paso, rico, cálido y con buen volumen, taninos maduros y estructurados aún por pulir, su postgusto destaca por la sensación de regaliz. Sin duda un tinto muy interesante.

Botella tomada en restaurante.
De color rojo picota de capa alta, ribete violaceo y lagrima densa y transparente.
En nariz muestra fruta negra madura, madera y tostados de calidad, notas lacteas y balsamicos, bosque humbrio, levemente especiado, todo ello con una intensidad muy alta.
En boca tiene una entrada portentosa, taninos marcados pero bien integrados, muy buena acidez, denso con mucho cuerpo, dejando un postgusto larguisimo.
Muy rico.

Es un vino de rojo muy intenso, de capa alta, ribete violaceo y con una lagrima muy densa y que tiñe un poco la copa.

En nariz es su punto mas fuerte, la madera esta presente, dulces, balsamicos, hierbabuena y sobre todos ellos predomina, un fuerte olor a bosque de tierra humeda, realmente agradable en nariz este vino.

En boca tiene un gran ataque, presencia te taninos bien integrados, y de nuevo resalta todas las vitudes que tiene en nariz.

Es un gran vino, con una muy buena relacion calidad precio.