Rojo picota de capa alta y pequeño ribete granate. Nariz cerrada al principio y que necesita media hora de aireación en decantador para abrirse. Aromas de frutillos del bosque en confitura sobre elegantes pinceladas tostadas, herbáceas / vegetales que entiendo son los restos de las maderas nuevas de su crianza y que se envuelven con las notas frutales en una especie de espiral empireumática y cremosa. Aromas lácticos, de yogurt de frambuesa, especias, hojarasca verde, hay fruta fresca con tueste, recuerdos de caramelos rojos, menta y eucalipto. Fondo terroso, de café con leche y frutal alicoradito. En boca es muy placentero, sabores que recuerdan a la mermelada de frambuesa tostada y cremosa, también a los torrefactos dulces. Levemente amargoso, pimentoso, pero con esos taninos cremosos evolucionados que dan volumen y sapidez en toda la evolución. Posgusto con peso, vuelve esa fruta golosa y los taninos dulces configurando un regalo de tildes infantiles para los sentidos. Es un vino compacto, con potencia controlada por una evolución en botella tras ese meticuloso trabajo de selección y maduración de la uva, largas maceraciones y una crianza en maderas nuevas como pocos las saben hacer. No tiene los terciaros habituales de otros vinos con esta edad, pero sí los matices evolutivos de vinos con más estructura polifenolica y graduación, donde hay una fruta espectacular en un buen momento de vendimia. Vinos cálidos. Ya sabéis mi predilección por los vinos tintos con bastante botella y de estilo más clásico, pero en este caso me quito el sombrero. Es una maravilla de vino y por eso solo existe un D. Mariano García que trabaje tan bien la relación uva top + madurez + maceración + crianza en madera nueva y cuyo resultado son vinos jugosos, cremosos, frutales, frescos y compactos. A ver que tal está con cinco o diez años más de botella, toda una curiosidad que habrá que solventar.

Rojo picota oscuro.

Es de un aroma cautivador que marca y se señala, es denso y concentrado, pero no por ello impenetrable, el tiempo lo ha domado y nos deja entrar en su interior. Hay una expresiva fruta con inspiración negra, tiene poder y atrapa. Hay moras, ciruelas y arándanos tan claros como profundos. Se entregan y revuelven con las notas tostadas, es intenso a más no poder. Punto láctico que lo centra a su procedencia. La crianza es tan noble y elegante como equilibrada. Especias dulces y otras más sabrosas picantes. Al movimiento surge un toque vegetal que refresca y amplifica el conjunto, tramándose al fondo balsámico.

En boca tiene otro discurso pues el tanino se agarra de tal forma, que casi duele. Araña con sentimiento, tiene tal fuerza, que gozas de placer por lo apreciado en la nariz y por lo que se desliza entre la boca, que no es sino por su gran contenido. Hay una fruta densa, carnosa, es lo bueno que tiene, que gana y se espabila, sabe a su procedencia y no te abruma con la crianza, que sin embargo tiene su espacio y una muy buena definición en forma de especias y un espeso café templado por las notas lácticas.

Catado por Grupdetast http://grupdetast.com/catas/viejo%20mundo.html

Capa muy alta,denso hasta no dejar pasar la luz y con alguna turbidez.
Balsámico, café y tofe/toffee, chocolate y madera.
Envolvente, muy goloso y sedoso, de inicio (con unos 15 minutos de aireación) unos ligeros toques de madera muy nueva que daban puntas secantes que fueron perdiéndose conforme avanzaba el tiempo de aireación.
Al final algunos sedimentos (precipitados ¿de falta de filtrado o clarificación?).
Exquisito y todavía vivo, aunque no le daría mucho mas tiempo si os queda alguna botella.

Denso, espeso y balsámico. En el reino de los balsámico tanto en nariz como en boca. Gran acidez volumen e intensidad, apabullante y casi intimidante. Combinó muy bien con unas migas extremeñas con tocino,vino de "pasarella", ´sólo para comidas muy especiales

Disfrutada esta última botella en excelente compañía, hizo que aún acrecentase mi excelente concepto sobre este VINAZO, el único problema que esta vez tuvo extraordinarios contrincantes, tales como Leoville Poyferre 2003 y Pichon Longueville Comtesse de Lalande, igualmente del 2003.
El vino sigue excepcional, tal y como se indica más abajo, la nariz grande, grande, con mucha fruta con excelente extracción y expresividad y muchos y buenos tostados, en conjunto es elegante y compleja.
La boca es maravillosa en todo, más aún al segundo día de su apertura, hay elegancia, complejidad, estructura, cuerpo, de todo y muy rico. Lástima que se tenga que comparar a dos gigantes que cuestan tres veces más que él.

Ya lo decia yo en mi ficha de cata de más abajo del año 2009. En año y medio comoo ha mejorado esta joya vinicola.
Continúa con todos los atributos expuestos más abajo, pero ahora con mucha más elegancia.
En nariz complejisimo, pero ahora con una fruta fresca y elegante, que parece que estas en medio de un huerto frutícola, prima la elegancia por encima de todo.
En boca elegante, sutil, casi puro terciopelo, expresividad suprema llena de frutas y aromas primarios y secundarios refinados.
Todo el conjunto con maravillosa armonia y perfecto engranaje.
Un impresionante y grandisimo vino, en un estado supremo.
Más que excelente y extraordinaria la RCP, ya que cuesta sobre los 50/60 €.

Picota muy oscuro
Aroma muy balsámico, pero también hay fruta negra compotada, madera fina, ahumados y regaliz, alta riqueza cromática y muy exuberante.
Cuerpo potentísimo, muy expansivo e intenso, buena acidez, voluminoso, aún está un poco secante, boca muy expresiva con tendencia balsámica, más que frutal.
En definitiva es un vino de alta intensidad, dificil de beber, poco apto para comer con él, de potencia desorbitada que apabulla y llega a tapar la expresividad natural. Para ocasiones especiales

En la cena lo catamos con un Cos Estournel 2002,se lo merendo en un plis`plas.Color cubierto,ribete granate.Nariz espectacular,multifactorial,frutas rojas,chocolate negro,vainilla,ragaliz,...La boca con gran estructura,taninos pulidos,muy largo.Desde luego la familia Mauro confirma que el nivel de los vinos Españoles es altisimo.Muy grande.

Color picota con borde violeta.
Aroma potente, elegante y complejo a frutos rojos, exóticos y negros en licor, chocolate, ahumados, minerales negros, regaliz, toques de vainilla y pasteleria, la madera fina esta en segundo término.
En boca es muy sabroso, paso de boca con mucho equilibrio y elegancia, muy aterciopelado a pesar de su gran estructura, taninos nobles, retronasal maravilloso y calcado a la nariz, el final muy largo y con mucha, mucha persistencia.
Un gran vino, pero aún en Mayo de 2009 está un pelin "verde", hay que decantarlo como mínimo una hora y media antes de beber.
El corcho una decepción, una pena para este vino, un 7,7
Dejar un par de años para disfrutarlo a tope.

Picota con borde granate y capa alta.
Nariz elegante y profunda con una gran madera muy bien mezclada con la fruta,notas de compotas,cacao y cafe.
Redondo,notas de chocolate y cafe,con un recorrido en boca sutil donde se funde la fruta y la madera,tiene momentos golosos y otros potentes muy envolvente.