En Enero de 2016 compré dos botellas de este vino a buen precio. Para celebrar el día de Navidad hemos abierto la primera. La dejamos abierta un par de horas antes de proceder con su valoración a 17°C. El corcho largo, muy compacto, con poco poro y tintado 2 mms desde su base.

VISUAL: Presenta un bonito color rojo picota de capa alta con el ribete en tonos rubí y con presencia de lágrima, gruesa, lenta, densa y abundante (95).

OLFATIVA: A copa parada emana claros aromas frutosos a mermeladas de fresa y frambuesa. Al agitar el líquido asoman notas dulzonas de uvas pasas y caramelo toffee, delicados especiados de canela y vainilla y unos frescos balsámicos y herbáceos con fragancias de eucalipto, regaliz y hierbabuena. En la pátina terciaria encontramos cuero curtido, algo de café torrefacto, guindas en licor y unos intensos recuerdos amaderados del roble. La intensidad es media-alta y su complejidad sobresaliente sin duda (94).

GUSTATIVA: En boca nos muestra un punch brutal, acidez descomunal y una gran amplitud. Los taninos los tiene a flor de piel, astringente de entrada aunque sorbo a sorbo se van dulcificando. El paso por boca es licoroso, de gran corpulencia y alta extracción. Los aromas retronasales son acompotados (confituras de frutos del bosque) con un fresco toquecito balsámico. El post-gusto es muy amplio, de tacto secante y con intensos sabores especiados de pimienta negra. También asoman recuerdos herbáceos de laurel pero predomina de fondo un puntito licoroso y amaderado con apuntes de duelas envinadas. De persistencia larga, casi cuatro minutos de gran disfrute con este vinazo (94). Considero que está en plena fase ascendente y que la otra botella debería esperar bastante para disfrutarla en su clímax. Entiendo las valoraciones de más abajo pues es un caldo que necesita muuuuchos años para equilibrarse, muy potente en estos momentos. Jay Miller le dio en 2008 una puntuación de 98 (y es que es un vino absolutamente "parkerizado") y ya indicó "... Déle 10-12 años de envejecimiento adicional y bébase desde el 2020 hasta el 2040."  Totalmente de acuerdo, recomiendo a cualquiera que tenga alguna de estas botellas que guarde el vino 20 años mínimo desde su añada, así que por mi parte, allá por el 2030, abriremos la otra para confirmar lo dicho.

La RCP atendiendo a que en 2016 me costaron 54 euros cada botella y que ahora están por los 150 euros, la considero excelente.

MARIDAJE: La abrimos en la comida de Navidad que consistió en una "Escudella de gallets" y su "carn d´Olla". Al día siguiente acompañó unas ricas lentejitas y nos la terminamos con nuestro surtido de jamón y embutidos ibéricos con queso curado. La verdad es que el maridaje con la suculenta sopita navideña fue brutal, intensos sabores cárnicos en absoluta armonía con los apuntes especiados y licorosos de nuestro vinazo. Una delicia!!

Salud-os!!

Ya me pasó con un 2002, y me argumentaron en la Bodega que fue un tema de conservación del Vino. Siendo 2005, para muchos entendidos, una añada mucho más elegante que la mitificada 2004, este vino ha sido una completa desilusión. LLevaba mas de 7/8 años conservandola en una decente eurocave.
Por un lado la fruta sobremadurada, por otro, evoluciones de taninos acidos, aunque suene paradójico. Al dia siguiente ya había notas oxidativas preocupantes. Hacia tiempo que no escribía en Verema, pero este suceso me ha turbado completamente. Será que me pasa como con el Priorat, que no se cuando abrir una botella en su momento justo?

Me gustan mucho todos los vinos de esta bodega. Este es algo extraño d enmarcar. Cereza picota de ribete violaceo-azulado, con capa alta. Nariz frutal, muy cargada, concentrada de frutos rojos y negros, madera muy presente y torrefactada, ahumada. Toque especiados y de regaliz y tinta.
Muchísimos residuos de pequeño tamaño que no molestan a la cata

Color picota violáceo.
Aroma de buena intensidad a frutos rojos muy maduros, ahumados, torrefactos, especias, toques minerales y florales, el chocolate muy amargo.
En boca es sabroso, pero el paso de boca está desequilibrado, el retronasal es dulzón con toques acidos.
El color y la nariz estaban bastante bien, pero la boca era una pena para un vino de 40 €.
No se si comprar otra botella para ver si este vino en realidad cuesta 40 €, aunque no he oido hablar, ni he leido nada bueno sobre él.

Es un borbotón rojo muy moderno, casi con destellos cobalto. Limpio y elegante. Complejo desde luego, con fruta como la ciruela y especias que van desde el clavo, la canela, gengibre y notas de betun envueltas en matizes
terrosos y minerales. Carnoso, aromático y muy envolvente, suave y de corpulenta estructura. Destacan higos,
cueros y regaliz. Buena acidez, saliviza y desprende notas en nariz de cafe y toques lácteos. Muy denso, con
mucho extracto. Fuerte a veces como un Porto con algun toque dulzón.