Sigue teniendo un color atractivo y apetecible, abundante lágrima y fluida.
Brillante, pero con muchas precipitaciones.

De intensidad media en nariz, se aprecia mas licor que dulce, poca fruta ya y mas vegetales, a mi me recuerda a espárragos.

La entrada en boca mantiene la acidez y frescor, es una entrada fluida, la misma sensación que en nariz, un postgusto medio y un pelin secante al final.

Quizás el tiempo ya empieza a hacer mella.

Buena nariz con acentuados frutos rojos como frambuesa y grosellas, con notas de chucherias y gominolas de fresa, regaliz roja, recuerdos de matorrales húmedos en monte tras la lluvia, y bayas frescas.
Entrada en boca agradable, fresco, de paso para mi gusto demasiado facil, medio cuerpo, equilibrado y redondo, con apreciable recorrido y buena persistencia.

Y además bien hecho, redondo , sin excesos, sabe y se disfruta en su esencia de vino. Grosellas, cassis, ligeros toques herbáceos , vegetales, ligeramente picante, sidral, lo del granizado de café, Pablo, ummmm, no lo capto. Boca redonda, fina, fresco, suave, acidez - dulzor, equilibrado, no , muy largo, agradable y tan rico y frutal..........

Interesante concepto de vino embotellado muy precozmente. Destaca su presencia con un bonito color violaceo propio de los vinos de aquella poblacion. En nariz predomina la fruta y la vainilla, en boca se muestra muy equilibrado, baja alcoholicidad, frutos carnosos marcados , flores blancas, sensacion de granizado de cafe, y tb manzanas harinosas, de ahi tb el toque aterciopelado en boca. Interesante relacion calidad precio

Catado junto a otros tintos con larga a crianza en una buena cena, es lógico que este nuevo vino de Benjamín Romeo se sintiera algo descolocado, y además no acabara de sintonizar con los comensales.
Eso, de todas formas, no quita que llamara poderosamente la atención precisamente, por sus maneras y hechuras.
Lo primero que captó la atención fué en lo visual. Sobre un color picota oscuro en copa, se le adornaba con un precioso e intensísimo ribete fínamente violeta.
En la nariz, se desmarcó, por supuesto, por su juventud. A copa parada, se aprecian la fruta roja, ciertas notas de pastelería y de manera envolvente, dulces y golosinas.
Acto seguido, emergen notas florales de violetas y más flores silvestres. Ciertamente con buena complejidad, dada su juventud. Desconcertante y agradable a la vez.
En boca, fresco, por supuesto. Envolventemente goloso, buen recorrido en el paladar y de final persistente y frutal en buena medida.
Interpretación muy personal de un llamativo joven tinto riojano, curioso y de buena RCP

Vista_ Color rojo picota de capa media alta, ribete violaceo, limpio brillante y muy vivo. Lagrima tintada pero no muy abundante.

Nariz_ Nariz característica de los maceraciones carbónicas riojanos y de buena intensidad, notas de gominolas de fresa, moras y regaliz con un fondo ligeramente fosforado, debido en mi opinión a la premura de su embotellado.

Boca_ En boca tiene una entrada media, cuerpo medio y taninos muy suaves que descompensan un poco el vino, notando que le falta estructura para llenar la boca y que no se note una sensación de ligero vacío. Acidez muy elegante que prolonga las sensaciones frutales en el postgusto.

Color rojo rubí capa media, ribete violáceo con abundante lágrima de lento lloro en copa.
En nariz aroma a frutas rojas destacandose la frambuesa, notas balsámicas con recuerdos a laca de uñas y leves brotes de madera(serrin).
En boca de suave entrada y buen recorrido, agradable frescor con una acidez correcta, dulces y suaves taninos, final medio-largo con buena persistencia.
Precio: 11 €.

Probado ya comiendo con amigos, realmente este vino sobresale y da vida a todo lo que acompaña. Todos resaltaron su fragancia y exuberancia y una cierta sofisticación que no es habitual en los vinos jóvenes. Esta última novedad de Benjamín Romeo está hecho para disfrutar.

Un gran vino joven de Benjamín Romeo, propio de su calidad. Probado en la fiesta de los vinos nuevos de la Ribera de Barcelona, organizado por Vilaviniteca. Color rojo limpio y brillante propio de los vinos jóvenes. En náriz aromas a frutos rojos, muy fresco. En boca un vino muy fresco, pero muy estructurado, muy fácil de beber y largo de postgusto. Realmente para el poco tiempo que está en botella, es fantástico.

Limpio y brillante. rojo picota de ribete violaceoconcentración de aromas primarios: fruta roja muy fresca; fresas, moras, etc..
en boca se presenta fresco, fácil de beber, goloso y redondo. Postgusto largo, con ciertas notas amargas/herbáceas (seguramente debido a su juventud)

Por hacer pocos días que está embotellado, está muy pulido.
Muy buen vino, en la linia de la bodega