Color amarillo pajizo con reflejos verdosos, limpio, brillante y con lágrima densa.
Nariz de intensidad media en la que destacan las notas frutales maduras como el albaricoque y la pulpa de uva, notas de flor blanca que se va definiendo y concretando en jazmín y finalizando con un punto cítrico. Con más oxigenación aparecen notas dulces de canela y vainilla.
En boca se muestra muy cítrico con intensidad de lima-limón. El oxigeno lo va limando y con él asoman la ciruela claudia, el melocotón y la fruta de la pasión.
Un vino sencillo, franco y agradable de beber.
El vino Drassanes 2015 tiene color amarillo blanquecino con destellos verdosos, limpieza y buen brillo.
Ataque en nariz de buena intensidad en la que destacan la fruta de hueso madura (albaricoque), la carne de la uva de mesa, notas florales de jazmín y una chispa cítrica de limón. Hay también notas lácteas de crema pastelera con aroma de vainilla y polvo de canela.
En boca es casi un zumo de limón al empezar, pero el trabajo del oxígeno lo va limando y aparece de nuevo la fruta de hueso a la que se incorpora la ciruela claudia y el melocotón. Buena acidez que le da frescura, franqueza y recorrido adecuado.
Amarillo pajizo con reflejos verdosos y dorados, limpio, brillante y con una lágrima grande y con caída lenta que previene de su marcado carácter glicérico.
Aroma inicialmente a fruta madura de hueso (melocotón o maracuyá, albaricoque) para pasar a toques cítricos y posteriormente a flores blancas (jazmín) e incluso un toque a lías a especia dulce como canela.
En boca entra con una buena acidez de cítricos (limón) que le confiere frescura, con un postgusto algo ligero, y evoluciona a fruta madura (ciruela Claudia).
Buen trabajo y cambio en el estilo con respecto a otras añadas.
Amarillo pálido con reflejos verdosos, limpio y brillante, bastante glicérico.
Nariz de media intensidad, aromas a flor blanca, cítricos y un punto balsámico.
En boca destaca sobre todas las cosas un punto cítrico bastante marcado que con oxigenación acabada integrándose, acidez y recorrido correcto.
Color amarillo pajizo brillante. Al principio, lo que más destaca en nariz son los aromas frutales como son cítricos y albaricoque. Al agitar la copa, salen aromas a flores blancas.
En boca lo que más llama la atención son las notas a frutas cítricas como el limón o la lima. Acidez marcada que le aporta frescor al vino. Conforme pasa el tiempo se va redondeando y toma un toque más dulzón.
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