Tras casi un año en bodega, decido abrir esta perla para celebrar las Navidades en familia, como tiene muchos restos, decido abrirlo y decantarlo con mimo. El corcho sale perfecto, pero se rompe a tres cuartos, decido sumergirlo y filtrar el vino con un colador.

Es más una curiosidad que otra cosa, ya que un vino con esa antigüedad no creo que tenga que ser valorado de forma habitual, presentaba un dorado anaranjado, muy elegante, en nariz, notas oxidativas, pasa, orejones…. Me recordaba a una manzanilla… curioso…. La boca, increíble, solo tenía la experiencia de un Gran Reserva de 1976, que tenía una gran nariz pero en boca estaba plano, pero lo cierto es que este era muy expresivo, sorprenden las notas salinas en boca. Muy buena acidez, buena estructura de vino, seguro que todavía aguantaría muchos años en este estado, pero creo que tampoco es el tipo de vino que me gusta guardar, por lo que he decidido darle matarile….

Es siempre ,un juego arriesgado ,acercarse a los vinos antiguos,por falta de criterios de comparaciones, de haber bebido algo similar en un pasado mas o menos reciente sobre todo en España.Este blanco de Rioja se presentaba con un misterio en la botella ya que por unica indicacion de añada ,la etiqueta nos contaba que este vino era del sexto año.????¿¿¿¿
El corcho no resistio a nuestra patosa manipulacion y salio primero la mitad por fuera y la otra por dentro.
No mas abierta el caldo iniciaba su ultimo viaje olfactivo y su lento aliento iba a dejarnos sin palabras con la unica certeza que la proxima hora iba a ser un retorno hacia el pasado,hacia la sabiduria de antes,de estos hombres que apostaban por una crianza larga y que sabian dominar el paso del tiempo.
Todos acordamos en decir que este vino tenia 50 años o mas y su color parecido a un viejo chardonnay borgoñes respaldaba esta opinion.
Faldadespojada.El bouquet queda magnificamenta afrutado y preciso,complejo y fundido,terciario sin nunca parecer vetusto:sus notas se declinaban en sabor a albarioques secos ,iodio mucha mineralidad y el rancio nos aparece como muy noble muy pulido recto largo.
La boca confirmar lo antes citado y destacala salinidad del vino y su acidez que aun le promete algunos años de vida.boca muy fresca,coherente con estructura longilinea y pulida,asociando prestancia y natural.Una leccion de paciencia ,abogando por una crianza larga, ahora muy abandonada y rechazada por los ''renovadores''de Rioja

Como diría mi amigo Zambulini, una grande botella.
Color dorado-amarronado. Pensar que después de medio siglo la nariz de este vino es un espectáculo de aromas concentrados, un bouquet tan concentrado y elegante que me atrevería a decir que es de lo mejor que he olido en blanco o al menos lo que más me ha sorprendido. En nariz como decía es muy intenso donde se destapan notas de fruta amarilla, pasas, dátiles, flores amarillas, frutos secos (orejones), notas minerales, barnices, sobre fondo de terciarios muy elegantes. En boca tiene buen ataque, tiene cuerpo ligero donde increiblemente manifiesta mucha frescura, una gran acidez y salinidad marcada con postgusto larguísimo. Una joya en extinción a un precio increible.