Dorado intenso brillante, burbuja apenas perceptible.
Nariz de media intensidad en la que destaca ante todo los aromas de la larga crianza, dando siempre un toque sutil y complejo. Notas de flor marchita, frutas blancas bien maduras, recuerdos de frutos secos, bollería, trazas especiadas y balsámicas, un fino fondo herbáceo y mineral, ahumados, todo con mucho fondo.
En boca es seco y directo, largo, con una buena acidez y un paso redondo, con un carbónico magníficamente integrado y unos recuerdos finales de frutos secos amargos y frutas de hueso, dejando una buena persistencia. En perfecto momento de consumo.
Un tiempo después hemos vuelto a probar este cava aunque ahora se trata de uva versión de degüelle reciente y por tanto con más de 10 años de crianza en rima, mostrándose complejo y equilibrado, muy elegante y francamente disfrutable, sin duda uno de los mejores cavas del mercado.
Intenso color oro viejo, con reflejos ambarinos. Escasa presencia de burbuja que se disipa rápidamente.
Nariz algo cerrada de inicio que precisa de tiempo y nos lo agradece. Es cuando aparecen las flores marchitas, fruta blanca muy madura, cercana a la compota, anisados, hierbas de tocador,manzana asada,masa de pan y ligeros recuerdos de frutos secos.
La boca se caracteriza por tener una interesante complejidad, carbónico ya muy integrado, tostados, ahumados, con una excelente combinación de madurez pero con viveza. Es de tacto algo graso, de medio cuerpo, muy franco respecto a la nariz y unos leves dejes de frutos secos en su despedida, junto con unos amargos de buena precisión.
Dorado pálido limpio y brillante, burbuja media y abundante.
Nariz de buena intensidad, madura y expresiva con toques florales, pastelería fina, frutos secos y mucha manzana asada. Incluso tiene un ligero deje mineral sorprendente que complementa a una gama muy elegante de ahumados y levaduras procedente de la crianza en rimas. Complejo, expresivo y sin perder frescura.
En boca se muestra amplio y maduro, vinoso, ofreciendo una magnífica acidez, un paso cremoso y un final donde destacan los frutos secos y las sensaciones florales. Buena persistencia. Quedan recuerdos de fruta amarga en el paladar. Carbónico perfectamente integrado, es un vino que está en perfecta madurez, para consumir ahora.
Confieso que bebo pocos cavas (lo siento, soy adicto al Champagne) y este es hasta ahora el que más me ha gustado de largo. El problema es que ya nos metemos ya en precios importantes (36 euros en restaurante), pero está claro que no me arrepentí de la elección. Un gran cava, digno de ser tenido en cuenta.
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