Que peligro las catas de vino a ciegas, y si encima te ponen en la tele...

Os adjunto la respuesta que le he remitido a B. Sánchez:

He leído con pesar y sorpresa el "editorial" que publican en el número 168 de la revista "Mi vino". Lamento que el señor Sánchez se sintiera engañado por la grabación que llevamos a cabo durante los Premios Mezquita. Nuestra intención no fue en ningún momento ridiculizar su opinión ni dejarle en evidencia, y lamento que no haya sabido entender el toque humorístico propio de un programa de entretenimiento. En ningún momento nos presentamos como expertos en la materia ni "entramos en el mundo del vino como un elefante en una cacharrería", como afirma usted en su artículo. Simplemente hicimos la cobertura de un concurso nacional de vinos para enseñar a los espectadores en qué consiste el proceso de la cata. El reportaje incluía una inocente "prueba" (se llama "El reto" y es una sección fija del programa, sin ningún tipo de mala fe) a la que usted y algunos de sus compañeros del jurado se prestaron amablemente. Muchos de ustedes (no fue usted el único) valoraron el vino de manera positiva, por lo tanto no se pone en duda la validez del veredicto; en todo caso se pone en evidencia que los tintos de mesa que se producen en España son de una calidad más que correcta (algo que no es malo).

Quiero aclarar que en ningún momento le di "claramente a entender que era un vino del concurso", y aún si hubiera sido así, no entiendo por qué eso habría de alterar sustancialmente la valoración de un profesional. En cualquier caso acepto su crítica, lamento el malentendido y su disgusto, y le pido disculpas si le hemos molestado. No obstante, le informo que TVE es una empresa pública, seria y rigurosa, y hubiera bastado con que nos comunicase que prefería que no se emitiera su entrevista para dejarla fuera del reportaje. De hecho, usted sí me pidió que no emitiera una parte de la misma (en la que aseguraba que el vino podía optar a una medalla Gran Mezquita de Oro), y como verá, así lo hicimos. Y sobre todo, quiero dejar claro que la organización del concurso no tiene ningún tipo de implicación ni responsabilidad en dicha grabación.

Pero lo que realmente lamento son los descalificativos y el vocabulario inapropiado que utiliza para expresar su crítica y su legítimo malestar. Me llama la atención que me tache de "zafio" (grosero, tosco), cuando mi comportamiento fue correcto y educado durante todo el certamen, incluyendo las varias cenas y comidas en las que estuve departiendo amigablemente con usted y su esposa durante largo rato. No sé a que se refiere por "friki", y si con "necio" quiere llamarme ignorante en materia de vino, ahí lleva usted toda la razón. El experto es usted. Yo me quedaría tranquilo. Si realmente lleva tres décadas en el sector y atesora una "garantizada solvencia profesional", no creo que un reportaje inocuo y sin mala intención pueda desacreditarle ni "ensuciar su profesión". Ni que los viticultores, bodegueros y lectores, a los que apela en su artículo, necesiten ningún tipo de aclaración. En todo caso, me preocuparía más del tono y el vocabulario que elige para sus escritos, que quizá sí le pueden dejar en peor lugar ante sus lectores.

Puestos a precisar, ya que le gustan el rigor y la seriedad, matizaré que no soy "operario" de TVE, sino periodista (mejor o peor, igual que usted será mejor o peor catador; pero periodista). Y de cara a la revista, advertirles del peligroso error de hacer pasar un artículo de opinión como este (con firma e incluso foto) por un editorial que, como ustedes sabrán, refleja la opinión del medio y no va firmado.

En cualquier caso, reitero mis disculpas y quedo a su entera disposición.