Buenos vinos con tapón de rosca: ¿SI o NO?

Publicado hoy en La Vanguardia:

LA VINOTECA CATALANA Envases innovadores para las últimas tendencias de consumo
RAMON FRANCÀS - Barcelona - 02/04/2009

El sector del vino tiende a adaptarse progresivamente a los nuevos tiempos, a los nuevos consumidores y a los nuevos momentos de consumo ofreciéndose desde vinos en lata, como la de los refrescos, o en spray dosificador, como el de los perfumes, a los bag in box (BIB): las conocidas como garrafas de vino del siglo XXI. El BIB es un recipiente de cartón que contiene una bolsa de un complejo a base de polietileno y poliéster metalizado provista de un grifo. Sus defensores afirman que este envase es más cómodo de utilizar y de desechar, y que ahorra almacén y es más ecológico. Ya no es ninguna rareza, tampoco, encontrar vinos con tapón de rosca o en los que el tradicional corcho se ha sustituido por un tapón sintético.

Entre las grandes compañías elaboradoras existen diferencias notables en cuanto al envasado de vino en bag in box.Mientras el Grupo Codorníu, a través de su bodega Raimat de Lleida, comercializa un tinto en Suecia y el Grupo Freixenet vende en Suecia, Noruega y Dinamarca un vino de mesa blanco, uno rosado y uno tinto bajo la marca René Barbier, desde Bodegas Torres rechazan este recipiente "por ir en contra de nuestros valores de prestigio y de la cultura del vino", según Miguel A. Torres, el presidente de la compañía. En Torres sí que han desarrollado un spray para su brandy y para su vino dulce de moscatel, lo que han bautizado como los Torres Flavours. Aseguran que "la acogida de este nuevo producto está siendo excepcional y supera todas las expectativas". Esta bodega también ha lanzado Flow. er, un botellín de 18,75 cl de su terpénico vino blanco Viña Esmeralda que incorpora un tapón que se convierte en vaso. El Grupo Garvey, que cuenta con una bodega en el Penedès, comercializa vinos en lata de 25 cl bajo la marca Hill. Aseguran que "es un envase moderno que encaja con las nuevas tendencias de consumo".

Jordi Miró, de la bodega de Corbera d´Ebre Ennak, ya hace cinco años que envasa parte de su producción en recipientes BIB de cinco litros. Comercializa 10.000 litros anuales de vino tinto con DO Terra Alta en este envase, principalmente destinado al mercado catalán. Entiende que el BIB es sólo un envase y que "lo que hay que valorar es su contenido". Defiende este tipo de envase porque permite mantener intacta la calidad de su vino, obtenido a partir de sus viñas propias de Gandesa, durante un mínimo de tres meses tras haberse abierto. En la prestigiosa cooperativa de Capçanes ya envasan 100.000 litros anuales de vino tinto y vino blanco en BIB. Utilizan el formato de 5 litros, y también el de 20 para comercializar en los restaurantes. Según su presidente, Francesc Blanch, venden un 65% de su vino en BIB en el mercado nacional. El resto lo exportan, principalmente, a Alemania, Noruega y Suecia. También estudian envasar vino en BIB de tres litros mientras ya venden vino con tapón de rosca en Estados Unidos. Una de les marcas catalanas que están apostando fuerte por el vino de calidad envasado en BIB es A Punt, de Jordi Rosselló y Oriol Pérez de Tudela. Seleccionan un blanco de la Terra Alta, un tinto del Montsant y un rosado de Tarragona para "ofrecer vino de calidad para el consumo del día a día". Pusieron en marcha su proyecto en el 2007 para vender en el mercado catalán 15.000 litros. El año pasado las ventas alcanzaron ya los 60.000 litros. Oriol Pérez de Tudela afirma que sus envases de tres litros contienen la misma cantidad de vino que cuatro botellas o 25 copas de vino "a un precio más económico". Añade que, una vez abierto, "el vino se conserva perfectamente durante doce semanas sin picarse", y que "la forma ergonómica del grifo hace que sea muy cómodo, fácil y práctico de utilizar".