Mi última botella de este gran y elegante priorato. Una garnacha redonda que te llena la boca de una gran calidad. Este vino va mejorando, mineral, expléndido y un recorrido muy largo. Lo recordaré. Gran garnacha del priorato. Decía en el 2008, ¿Cómo estará de aquí a unos años? Pues está sobresaliente, expléndido. Una gran garnacha del priorato, muy mineral y balsámico. Con el color cereza brillante ya va mostrando todo lo que nos va a dar. Unos aromas a fruta roja y muy balsámico y una presencia en boca que es una gran delicia, muy mineral y un recorrido largo, sabroso y placentero. Gran, gran priorato....!

Cuatro años más tarde me vuelvo a encontrar con una botella de este gran vino de Garnacha, posiblemente uno de los vinos de Garnacha vieja más intensos del Priorat.

Color cereza , ribete granatoso, capa media-alta, fina lágrima tintada que discurre por toda la copa. En nariz se muestra elegante, equilibrado y con todos sus matices bien conjuntados: fruta roja bien madura, notas balsámicas intensas con mentolados y algo de anís, suaves tostados maduros y bien integrados, taninos domados, notas especiadas muy finas, intensa mineralidad con recuerdos de licorella húmeda. En boca es intenso, una excelente entrad, suave astringencia algo dulzona, fruta roja bien madura, muy buena acidez, sabroso, goloso, intenso recorrido bien estructurado, tostados y taninos maduros e intensos bien conjuntados con una suave mineralidad que los refresca, balsámico, marcados tostados y persistente. Final largo, postgusto de fruta madura y retronasal suavemente ahumado.

Excelente evolución y con ganas de volver a degustarlo más adelante. ¡Magnífico!

Más info en: http://www.elvi.net/2012/09/21/clos-dominic-vinyes-altes-seleccio-ingrid-2005/

Decía en el 2008, ¿Cómo estará de aquí a unos años? Pues está sobresaliente, expléndido. Una gran garnacha del priorato, muy mineral y balsámico. Con el color cereza brillante ya va mostrando todo lo que nos va a dar. Unos aromas a fruta roja y muy balsámico y una presencia en boca que es una gran delicia, muy mineral y un recorrido largo, sabroso y placentero. Gran, gran priorato....!

Color rubí oscuro.

Aroma muy balsámico, fruta roja y negra con mentol y eucaliptus, posteriormente aparece pimienta negra de una notable mineralidad muy prioratina.

La boca tiene muy buen cuerpo, alta acidez, aún un poco duro, excelente presencia y permanencia en boca; de igual forma tiene una alta expresividad muy propia del Priorato. Muy largo con final netamente balsámico y mineral.

Desde luego es un vino sorprendente, produce una interpretación de la garnacha prioratina realmente fuera de lo común que merece un gran aplauso.

-color "garnatxa",marronoso tenue rojizo, ribete rojo algo atejado
-en nariz licorosidad exquisita (de verdad), iglesia románica (vieja me vale) con sus velas y demás, al voltear sobresalen frutillos negros especiados y algo alcohólicos (alcohol para tomar a cucharas llenas).Ligera coca-cola. Se define y descifra el Priorat auténtico (sol,pizarra,sequedad...), histórico,la garnatxa recogida con el sudor de la frente en pendientes imposibles. Fondo de cacao,acocolatado. Nada sobresale y todo está presente.Auténtico.
-En boca rusticidad de la buena,formidable.Goma-licorosa-pizarrosa junto a una frutosidad terrible.Textura algo ácida y terrosa. Cueva subterránea,calcárea-pizarrosa,oscura y húmeda (con el lorenzo acechando). Untuosidad y amabilidad terrible. Franco,directo y sincero,te habla como un buen amigo,con el brazo rodeandote la espalda,se deja querer.

Algo serio la verdad este vino. Es contundente y muy bonito de aspecto y aromas de flores de infusión y despliegue de licorizados que domina mucho entre los toques de pasas, ciruelas y hierbas aromáticas. Vino que tiene que abrirse bastante, se decantó dos horas previas ( media botella), y dejando buenísimas sensaciones de frutas silvestres, algun especiado, incienso y laca. Muy agradable y de largo recorrido.

Jornada de puertas abierta de Clos dominic en Vilaviniteca. Este es un vino que a pesar que le queda tiempo en botella, pues se ha embotellado hace relativamente poco, es un canto a la garnacha. Excelente garnacha del priorato. Color rojo cereza brillante. En náriz le cuesta aparecer los aromas pero poco a poco se muestran aromas a fruta roja y negra. Noto una cierta madera y ciertos aromas de tostado. En boca es una delicia, tiene un tanino muy bien integrado y maduro. Un buen recorrido y largo. Cómo estará de aquí a unos años!

No soy persona de catar vinos de gama alta, pero en serio que este vino me ha dejado con un sabor de boca increiblemente agradable.

Color cereza poco cubierto, ribete granatoso, capa media-alta, lágrima fina, densa y tinta. En nariz da inicialmente sensaciones licorosas de cognac i grand-marnier, su fruta negra bien madurada deja entrever un buen producto, con notas vegetales y florales, ahumado, balsámico, especiado, notas torrefactas, ligeras sensaciones de fondo de pan tostado, tofee, notas de barrica bien pulidos y elegantes, final abiertamente avainillado y mineral pizarroso. En boca tiene una muy buena entrada, es potente, persistente, recorrido largo, los tostados de la barrica deben aún de pulirse más pero agradables, acidez correcta, ciertas notas amargosas y secantes. Final largo. Postgusto especiado y torrefactado. Aún le falta algo de botella para que se dome un poco.

No es el estilo de vinos que compraría, por motivos económicos, pero sabiendo que es un vino de corta producción (menos de 400 botellas) considero que su precio es más que correcto.

Precio en tienda €56,90

Color picota totalment cobert, de vora grana. Aromes de fruita negra molt madura, prunes, gerds, mírtils,.... especiat també, amb notes de pebre negre, i lleument balsàmic, amb notes de regalèssia... apunts fumats també... Pas en boca ampli i consistent, on la presència altiva de la fruita no aconsegueix dissimular la presència de la fusta, que va conjuntant i perfilant aquest magnífic vi. Retronassal potent, amb records de panses i un xic mineral. Com ja he dit magnífic.

Qué pedazo de vino tiene la bodega en este Ingrid! A Tuija le enamora la garnacha. Confitura de frambuesas desechas entre pimientas y cáscara de nuez moscada. Qué prensa de fruta negra y grafito, qué sensacion de masticar pepitas de cacao y el sabor inmenso del regaliz negro (Zara) impresionante; boca suave con el latiguillo incisivo de alcohol que me imagino cuajará, se rendirá entre la fruta y la madera. Largo, sedoso. Con una sensualidad deliciosa y un paso lento, agradable, una jugosa acidez, un pastel de ciruelas con bizcochos anaranjados en licor, y vuelve la retronasal de macís, incluso aromas de vihta, humos y mentas. Tiene el vino una untusosidad que hacia tiempo no saboreaba en la fabulosa garnacha.