Tercera vez que lo catamos.
VISUAL: Capa media-alta, de color picota granatoso.
OLFATIVA: Alta intensidad inicial, aromas de fruta roja con marcados aromas tostados, cacao, chocolate, café, torrefactos y madera. Evoluciona hacia notas minerales y balsámicas sin perder los aromas iniciales.
GUSTATIVA: Entrada franca, amplio, sabroso, carnoso, potente, con recorrido largo y postgusto a madera y fruta muy bien integrado.
Sigue estando muy bien.

Vuelto a catar en compañía y aún nos parece más complejo.
VISUAL: Picota granatoso, capa media-alta y lágrima abundante.
OLFATIVA: Alta intensidad, cacao, chocolate, café con una fruta roja madura muy elegante de fondo. Le salen notas de madera multitud de aromas propios de la crianza muy agradables y la fruta sobresale más, incluso notas minerales, balsámicos, mentolados, sin perder las primeras notas, muy complejo.
GUSTATIVA: Elegante, sabroso, carnoso, pesado, con recorrido largo y postgusto a madera y fruta muy bien integrado.
Nos parece un vino muy Parker
12,5€ aprox.

VISTA: Sigue joven. Muy oscuro. De altísima capa. Los tonos azulones se han vuelto más granates.
NARIZ: Sigue complejo, aunque con menor intensidad. Además de los aromas de mi anterior cata, aparecen ricos aromas lácteos y de azucar quemada.
BOCA: Vino de muy buena estrucutura pero sin estridencias. Musculoso. Concentrado. Frutal y goloso. Mineral.

Hace tiempo se me rompió una botella algo cara para mi bolsillo de esta denominación. Era un mencía, como éste. No había vuelto a disfrutar de una botella en mis manos de esta D.O. por supersticiosas maquinaciones de mi mente, aunque sí había bebido Bierzos, pero desde entonces no las manipulaba yo. La botellas, claro... Ya saben que, de donde son estas cepas, "meigas haberlas haylas". Este verano disfruté del Bierzo...Cacabelos, Valtuille, Villafranca...pueblos llenos de encanto, con gentes maravillosas, que con sus finos vinos frutales y florales hacen que esta comarca tenga un futuro increible en el panorama vitivinícola internacional. Olviden las meigas y preparen los sentidos para compartir la mencía del Bierzo con encantadoras personas que sepan sentirlo como merece.

VISUAL: Capa alta, color picota muy intenso con ribete púrpura.
OLFATIVA: De muy cuena intensidad, destaca la fruta negra madura, alguna nota mineral y le sale una madera muy noble.
Evoluciona muy bien, volviéndose una mezcla muy armónica de los anteriores aromas.
GUSTATIVA: En boca es muy potente, con muy buena entrada, un paso muy marcado, taninos muy marcados. Con buen recorrido y un postgusto que recuerda a la fruta.

Precioso color rojo oscuro con toques purpura propio de la mencia. retronasal de larga intensidad dominada por la fruta(embaucador). En boca mantiene el perfil(frutos rojos). Buena estructura y largo.(interesante).

Una fase visual destaca un color el color de la mencia, rojo picota fuerte, que en este caso lo es más.

En nariz es muy intenso, complejo, destacando la fruta de tipo negra madura y con detalles de madera.

En boca entre la fruta y los taninos, tapan otras percepciones. Buena acidez.

En fase Retronasal otra vez se aprecia la fruta.

En estos días, que esta el tema presente, digamos que es más un vino para catar que para beber.

No puntua , pues si es para catar, seria un 9 y si fuese para beber y maridar seria un 8.

De vino e increible de aromas. me ha gustado mucho. Nos convenció nada más verlo caer en la copa, a borbotones, negro, precioso. Buena nariz. Nos llamó la atención al principio que salieran los aromas que aqui damos a la listan negro, tierra, picon rojo, retamas, minerales...fresas. Pero muy agradable n la boca con una persistencia muy interesante, concentrado y sutilísimo. Buena acidez. Vino bastante completo.

Intensidad de color muy alta y ribete cardenal. En nariz es muy mineral, con frutos rojos y toques balsámicos. Sin embargo aparecen ciertos recuerdos de goma quemada y fósforo de cerilla, que puede indicarnos ciertos errores de fermentación. Son muy ligeros pero están ahí. Según me comentaron en la próxima añada (07) no aparecerán. En boca es un pelín agresivo al tacto, muy seco y con buena acidez. Final de duración corta.

VISTA: Sorprenden sus tonos amoratados con algún reflejo azulón y su centro negro.
NARIZ: De potencia media-alta, desprende aromas florales, de regaliz, curry, brea, aceituna negra, pimienta y mucha fruta (moras y ciruelas negras). Notas licorosas.
BOCA: Bien estructurado. Largo. Persistente. De muy buena textura. Elegante y rico. Recuerdos de chocolate negro y ciruelas pasas.

Gran vino. No hay duda. No es excesivamente concentrado y con la debida elegancia en sus formas. Sus colores me han hipnotizado. Quizas hay que saber escoger su momento. Después de un magnífico día en el que haya algo que celebrar se convierte en un extraordinario compañero.

Vista: Rojo picota de ribete granate, capa alta, con alguna turbidez, lágrima densa con color.
Nariz: Potente y franca. Fruta roja y negra muy madura, flores de violeta, con un toque goloso y ligeramente balsámico y mineral, con notas de regaliz dulce, cacao, turba y tostados.
Boca: Entrada suave, seco, de buena amplitud, cuerpo medio, notable amargor, taninos vivos que se agudizan con la sensación amarga, correcta acidez y final de media persistencia.

Un vino muy interesante en nariz, muy bien tratado por la madera, con mucha fruta pero que en boca resulta algo desequilibrado por culpa de una amargosidad de madera que se arroga un protagonismo excesivo.
Su precio sobre los 12 euros.