Gran Abadengo 2005
Gran Abadengo 2005
FICHA TÉCNICA
D.O./Zona
Pais:
España
Tipo de Vino:
Tinto
Graduación (vol):
14,00%
Varietales:
100% Juan Garcia
Precio aproximado
Precio Aprox:
De 20 a 29,9 €
PUNTUACIÓN
Nota de cata NOTA MEDIA:
8.76
/
94
Nota de cata CALIDAD-PRECIO:
8,8
Opiniones de Gran Abadengo
OPINIONES
32

Me encanta su fruta roja sazonada y en parte caramelizada, sus notas de vainilla y de crianza avanzada, su toque herbáceo y ahumado. Nada sobresale, todo está conjuntado. Pero me quedo con su final salino, y es que ultimamente estoy en esa línea de reducir todo a una sola cualidad.
Aquí hay raices y base.

En la fase visual presenta un color picota alto, con destellos y ribetes entre granatosos y violáceos, capa muy alta y lágrima densa.

Intensidad de tipo medio a alto muestra a la nariz, con predominio de fruta, muestra de la madera, vainilla, balsámicos y mineralidad.

En la boca es donde mas me ha gustado, suave, llenando la boca, con una integración muy bien conseguida, acidez en su punto y los taninos muy bien integrados. Fase final muy larga.

Botella con el nombre en la etiqueta con cruce de letras y contraetiqueta con información suficiente.

Cata realizada en el Club de cata del Círculo de Recreo, en la jornada de las Juan García.

Desde aquí le doy las gracias a Cathy, por su detalle de generosidad y a la vez la felicito por trabajar con esta bodega y estos vinos.

Habría que verlo en una cata a ciegas, destrozaría a más de uno. Cuenta con una falsa vejez, una madera curtida, fruta roja en sazón, humo blanco y muchas especias. Fácil de colocar en Rioja, e incluso en pensar en la 2001, aunque esto ya sea dejarse llevar. Lo ofrece casi todo desde el principio, salvo su edad, y esto, si se tratara de una mujer, supondría un atractivo añadido.

La bodega apuesta por la sencillez en las etiquetas, pero en éste se produce un cruce entre las dos palabras del nombre donde se remarca la inicial, y que junto a la botella troncocónica alcanza un aspecto muy deseado. Me quedo muerto al ver la vejez de las cepas, más de cien años, siento curiosidad por la producción de las mismas, pero quizá menos de 1 kg. por cepa.
Vino evolutivo, cada botella que se abre dice lo suyo, pero dentro de un estilo definido. Buenísima expresión de crianza.
Sin mucha capa, cereza abierto de borde granate, buena lágrima que cae esparcida.
Aroma de cierta evolución, parece más mayor, elegante, rico en fruta roja, tanto silvestre (bayas, moras), como fresas y ciruelas en sazón, notas ahumadas, tabaco rubio, con fondo bien especiado y algo de monte bajo.
Equilibrado en boca, pasa suave, pero cuenta con acidez frutal, sabrosillo, aunque de taninos un tanto secantes, ahumado en retronasal, duradero.
Llevo tres practicamente seguidas, pero quiero más, invita a la pausa. Ya que me quité el sombrero con el crianza, ahora no tengo más remedio que inclinarme a modo de reverencia.

Color rojo picota granatoso con ribete rubi y algo degradado.
La nariz es de buena intensidad, fresca, con predominio de las notas de fruta roja en sazón, tostados, vainillas, balsámicos y mineralidad.
En boca tiene buena entrada, fresco, excelente acidez, tanino presente pero publido, buen equilibrio entre la fruta y la crianza, amplio y de buen paso tiene un final largo. En retrogusto vuelven las notas de fruta roja, regaliz y las propias de la crianza.
Buen arribes, buen vino.

Botella tomada en restaurante.
De color rojo picota de capa media, ribete rubi y lagrima densa y transparente.
En nariz muestra fruta roja madura, geranios, piedra mojada, regaliz, monte bajo, notas lacteas, toffe, balsamicos contenidos.
En boca tiene una entrada golosa, taninos redondos, muy buena acidez y un postgusto medio, afrutado y con recuerdos minerales.
Muy rico.

Tras la magnífica botella de Gran Abandengo 2004, mi relación con esta bodega ha sido de total mala suerte-decepción.
He probado todas las gamas (incluido Bruñal) y no sólo una botella y siempre he tenido un resultado similar: o cerrazón total del vino, o reducción radical de éste. Incluso problemas con el corcho (cosa que evidentemente, puede pasar y no es nada de lo que se pueda extraer conclusión alguna)

Pero... mucha mala suerte.

En este caso, botella catada junto a otro Veremero, toneladas de reducción. Nariz completamente neutralizada. decantado... una horilla larga comiendo y nada de nada.
En boca mejor. Bastante mejor, pero sin llegar a ser la sombra del recuerdo de aquél Gran Abadengo que me encantó. Me duele decirlo, pero el vino no aporta nada. Plano, con buena acidez algunas notas de fruta roja fresca, toques minerales sutiles, pero poco más. apagado.

Nueva botella, la última... y poco más que decir.

Como al titulo me refiero este vino es sinónimo de calidad. Es el vino de alta gama de los Abadengo y se nota. Un vino muy bien trabajado.Aroma típico de la varietal Juan García a especias mezclado con una elegante vainilla pero sin tapar, bien integrada.En boca es de trago largo y sedoso ,se deja acariciar y te deja que lo aprecies. Postgusto largo y sabroso. Disfruté mucho su momento. Un vino para parar el tiempo.Arriba Arribes!!!!.

Color picota con borde granate, espejo limpio, capa alta y sin lagrima.
Nariz potente, con frutas maduras , minerales , especies y tierra humeda. Buena peristencia.
Paso por boca goloso, redondo, con taninos integrados , armonico , llena la boca de sabor frutas maduras dulces , carnoso y por encima de todo muy goloso. Invita a seguri bebiendo con un postgusto medio-largo

Vestido intenso de rojo picota, de capa media con ribete rubí, con leve degraadción progresiva desde el centro de la copa. Su aspecto, es brillante con buena pigmentación, lágrima lenta y firme.

Aromas iniciales de fruta roja muy madura en sazón que combinan con notas minerales moderadas y armónicas, seguidas de agradables notas de la barrica, bien conjugadas, pulidas e integradas que vocan notas de moka, cacao y especias (vainilla, nuez moscada y canela), con ligero fondo de romero y sensación pizarrosa.

En boca es muy sabroso, evocando fresas y frutos del bosque, con apuntes licorosos que se entremezclan gratamente con su paso por barrica francesa, potenciando esta su caracter y buena evolución. Aparecen tostados amables, vainilla, mentolados, especias y pizarra, todo envuelto en un velo de fruta bien madurada. Tiene un recorrido ágil pero sabroso a la vez que complejo. Su estructura es media, sus taninos dulces y bien pulidos y su acidez, a la altura de las circunstancias. Augura mejorar notablemente en un año o dos. Es un vino sincero, agradable, invitante a seguir bebiendo, con buen equilibrio y final frutal, aterciopelado, dejando muy grato recuerdo en boca. Longitud media-larga.

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