Color amarillo pajizo, limpio y brillante.

En nariz es aromatico, con mucha fruta madura (el melon es de libro, pera), ligeros aromas herbaceos y florales, recuerdos citricos, nariz dulzona.

Es mas expresivo en nariz que en boca, vino de paso facil, ligero, fresco, con la acidez algo justita, afrutado pero no tanto como en nariz, no es un vino con pretensiones pero sin duda tiene su momento, para chatear es ideal.

A la vista se presenta con un color entre pajizo y amarillento clarito, con reflejos y destellos de color acerado, limpio y brillante.

En la nariz se muestra con bastante buena intensidad dentro de los blancos, con detalles bastantes de tipo herbáceos, con fruta madura de las de tipo hueso y también detalles florales.

Al paso por la boca resulta fresco, goloso, con buena acidez y algo de sensación grasa.

Muy agradable resulta su fase final.

Vino fresco, fresco y agradable.

Solos conocía los vinos tintos de esta bodega, (incluso la he visitado) con sus Juan García e incluso su Bruñal, peor no recuerdo el haber probado este blanco que está muy bien.