Buena noche catando vinos del Somontano.

Pues tuvimos la suerte ayer de realizar una nueva cata de vinos del Somontano, donde tuvimos la ocasión de poder regresar, mediante la siempre gratificante costumbre de catar, acercar un poquito más esta tierra a los allí presentes en la cata. En esta ocasión (y como ya ocurrió en Septiembre con la primera parte de la cata de vinos de esta D.O.), el hilo de ésta mantenía la premisa de ofrecer a probar algo más que lo que todos fácilmente podríamos encontrar fuera de la región. Es decir, centranos en esas pequeñas bodegas, familiares muchas de ellas y con unas produciones muy alejadas de esos millones de botellas que son capaces de producir los grandes de la zona.
Todo ello regado, con historias (algunas de ellas, más bien cuentos) curiosidades y algún detalle. Creo que, humildemente, algo conseguí.
Siete fueron los vinos de la velada que degustamos. Sin querer mucho alargarme, os hago un poco de recordatorio de lo que dió el encuentro de sí:

1- MINGUA BLANCO. Un coupage de Garnacha Blanca y Chardonnay inédito, para un vino que no fue el más lucido de la noche, precisamente. Luego, a sabiendas de sus pretenciones y la RCP, quizás si se le comprendió un poco mejor.
2- OTTO BESTUÉ CHARDONNAY. La interpretación de la clásica Chardonnay del Somontano, esta vez por obra y gracia de una bodega pequeña de la comarca. Además, botella llamativa en su conjunto; tapón de rosca ( hay que abrirse al mundo!!) y a la vez un guiño en parte de la etiqueta a los trabajos del hombre y su día a día en épocas pasadas. La abuela sigue con nosotros...
3- DE BEROZ ESENCIA DE TINTOS. Creo que el triunfador de la noche, por unanimidad...y era rosado. Coupage de 4 variedades, bonito color (espectacular diría yo); buena nariz y mejor boca donde demostraba muy buenas cosas. Todo un hallazgo. Muy interesante y con una RCP espléndida.
4- CHESA ROBLE. El primer tinto de la noche. 5 meses en barricas que nos mostraban un vino tremendamente evolucionado para ser un 2008 y que mostraba mucha más madera que los otros tres tintos, todos ellos con mucho más paso por la madera. Despertó dudas, comentarios negativos a la par que buenas sensaciones en algunos otros, aunque debo reconocer que en menor medida. Un poco de todo.
5- IDRIAS SEVIL. no pensaba que iba a pasar tanto de puntillas por la cata, pero no arranque muchos comentarios de este vino...aunque tampoco negativos, ciertamente. Y eso es bueno. La nariz, muy interesante, y evolucionando conforme pasaba la noche.
El gran Joan Milá nos dejó con este vino su huella en el Somontano.
6- OTTO BESTUÉ FINCA SANTA SABINA. Catamos el 2005. Y en este caso hago referencia de la añada, pues tuve la oportunidad de catar el 2007 no hacía mucho tiempo y con este vino siempre me ocurre lo mismo. Bueno, muy bueno (creo). Pero con una vida tremendamente larga de guarda. Éste 2005 estaba vivito y coleando. Buena nariz, profunda y compleja y una boca con una destacada acidez y unos taninos muy vivos todavía.
Un tren de largo recorrido.
7- BALLABRIGA PARRALETA EMOCIÓN. Y llegados al último vino, la "rara avis" de la noche: monovarietal crianza de 9 meses de la variedad autóctona del Somontano Parraleta. Curioso, alegre incluso, expresivo. Poca madera y mucha fruta y/o frutillos del bosque en la nariz. Vino para beber con calma para apreciarlo en toda su definición, aunque se bebía solo. Gran trago largo, sabroso y para no parar de disfrutar.
La puntilla, pues creo que a este vino le pesará siempre la RCP o, más directamente su precio. La calidad ya se le presume.

Bueno, pues esto es un poco lo que dio de sí la velada de ayer Viernes en Sant Cugat.
Por supuesto, no puedo olvidarme (jamás lo haría) de todos los allí presentes. Desde Carlos ( el propietario, corriendo de aquí para allá, como siempre9, pasando por la gran cantidad de foreros que allí estuvísteis y los que no eran foreros, también. Y recuerdos de los que no pudieron asistir y fueron también artífices de que lo de ayer pudiera haber salido bien (va por tí, Pep).
De todo corazón y repartiendo besos y abrazos (inmensos!!), muuuuuuuuchas gracias.
Volveremos a repetir... seguro.

Xavier Gutiérrez