Porque me ha parecido una muy buena godello con un precio ajustadísimo.

Buena fruta blanca de hueso, con pera, manzana amarilla y verde, con un manto de flores y toques cítricos que van surgiendo, es lo primero que te encuentras al descorchar. Notas de infusión, suaves herbáceos y balsámicos y una mineralidad que gana peso, siguen el desfile, con ese puntito de pastelillo de limón y mango. Es precisa y potente.

En boca te encuentras esa fruta en su punto justo, con notas de pólvora, con una acidez excelente y esos apuntes cítricos y balsámicos tan refrescantes. Hierba recién cortada, camomila, esos toques de pastelillo... es cremoso y carnoso el paso por boca. Suaves especias picantes con una buena carga mineral y un toque salino. Buenos amargores que balancean el punto dulce y lo suavizan. Postgusto floral y frutal, ligeramente mineral y amielado.

Me ha gustado mucho este básico de Emilio Moro. Le seguiremos la pista.

Segunda botella que pruebo. Sacada de nevera a 4-5ºC y atemperado a 8-10ºC en copas amplias Lehmann Jamesse.

Visual

Amarillo dorado pálido pajizo, limpio, límpido y brillante. Bonito. (9)

Nariz

De buena intensidad con fruta blanca y amarilla de hueso algo madura, cítricos como el pomelo y la lima, un punto de mango, papaya y maracuyá, flor de azahar, toques minerales, ahumados sutiles, toques de frutos secos, cantos rodados húmedos, pastelería algo dulzona, crema catalana y muy leves amielados.

Muy buena nariz, compleja pero ya algo madura para mi gusto (igual es la botella o es que ya tiene 3 años). (8,75)

Boca

De gran ataque, muy frutal (algo madura ya) pero de buena acidez, seco, cremoso, de buen volumen, densidad media plus, buen cuerpo y estructura.

El paso por boca es un pelín alcohólico, con un punto vegetal-amargoso, untuoso, graso y gastronómico.

El final es largo con mucha fruta blanca (uva blanca, melocotón, albaricoque), recuerdos de pomelo y lima, un punto amielado, tostado y pastelero que deja una impresión algo cálida y contradictoria (de entrada parece muy fresco pero luego van apareciendo notas licorosas y cálidas).

Buena boca aunque me deja algo confuso pues en la nariz hay buena complejidad y algo de calidez y madurez, en boca parece inicialmente muy fresco (aunque la fruta sea ya madura) pero luego me parece levemente licoroso/vegetal y por terminar de integrar. No sé si es que necesita más botella o bien es al revés, que pasó su mejor momento ¿ quizá hace un año ? y está yendo a un perfil de godello cálida que ya no me gusta tanto. (8,5)

En cualquier caso, muy buen godello de excelente RCP (cuesta unos 12-13€ pero lo pude conseguir de ofertón por unos 8€, por lo que no hay queja).

Probaré otra botella a ver si es que fue esta botella o si, efectivamente confirmo que este vino o necesita más botella o, definitivamente, ha pasado su mejor momento ya.

Amarillo con irisaciones doradas. Nariz con fruta blanca y amarilla madura con hueso, destacando los albérchigos y la papaya, bajo matices que recuerdan a los ahumados y ligeramente a los frutos secos ( algo de maíz tostado ). Hay mineralidad de perfil caliente, cabeza de cerillo y misto, bastante hojarasca, maderas envinadas, sotobosque de ribera de río, pomelo, dulce de membrillo y un matiz que conforme se airea se convierte en notas claras de pastelería, lías, nardos, azahar y crema catalana. La aireación le sienta muy bien. En boca impacta, con estructura, pero también de ataque meloso y muy buena frescura. En el paso se le nota el hollejo de uva blanca madura macerado dejando una sensación algo agreste / vegetal, quizás licorosa, pero que le ayuda a dar longitud para llegar hasta el posgusto, levemente amargoso, vegetal y de hollejo maduro / tostado, que juega con las intenciones finales de cremosidad. Retronasal con matices secundarios y tostados, de uva blanca y miel tostadita. Un vino que en estos momentos baila con varias sensaciones pendientes de mayor encaje, lo que le otorga complejidad. No es de los Godellos florales y femeninos, pero también es más personal y creo que con desarrollo en botella. Esta pendiente de mayor integración entre lo frutal, lo vegetal y los matices secundarios de la elaboración. Es la primera vez que lo pruebo y tenía mucha curiosidad, la Bodega que hay detrás es un buen pilar de garantía enológica y saber hacer. Apostaría porque habrá cambios sensoriales en las próximas añadas.

Botella borgoñona de vidrio de buen peso, etiquetado moderno pero austero, de tipografía negra y fondo blanco.

Cápsula negra con la firma de la bodega y el nombre del vino en su parte superior. Sale perfectamente tirando a presión con la mano.

Cierre de corcho DIAM3 que garantiza que esté libre de TCA al 100%.

Servido a unos 7-10ºC en copas Riedel Ouverture.

Visual

Amarillo dorado claro con leves reflejos aún algo verdosos, limpio, brillante y de cierta lágrima.

Muy buen packaging para un vino de entrada de gama, estupendo cierre y muy buena visual. (9)

Nariz

De gran intensidad y expresividad, limpio, con notas de fruta blanca y fruta amarilla de hueso de cierta madurez (no mucha), leves cítricos, flores blancas y amarillas, hierba recién cortada, heno, recuerdos amielados sutiles, herbáceos leves (hinojo, hierbabuena), algo de vainilla y un punto mineral.

Olfativa intensa, expresiva, bien definida, fresca y mineral. Muy buena. (9,2)

Boca

Ataque frutalmente fresco y levemente mineral, de muy buena acidez, de cierto volumen expansivo en boca, seco, densidad media plus, buen cuerpo y estupenda estructura.

El paso por boca es sabroso, de cierta complejidad, muy redondo y agradable.

El final es largo, con fruta blanca y amarilla de hueso madura levemente amargosa, algunos cítricos, recuerdos de hierbabuena, un punto especiado y goloso en un retrogusto estupendo y una retronasal, si cabe, aún mejor, con recuerdos florales, frutales, balsámicos y minerales. (9,3)

Blanco de la gama de entrada de Emilio Moro en el Bierzo que está a un gran nivel ya y que, con 2 años, está en fantástico momento de consumo. Puede aguantar un par de años más en perfecto estado de consumo pero creo que, ahora mismo, está en su momento.

Su PVP ronda los 12€ (aunque a mí me salió ligeramente más barato). Excelente RCP para lo que ofrece.

   Este es el vino de entrada de Emilio Moro en el Bierzo, un godello con una relación calidad precio muy buena.

   Es un vino limpio en nariz, expresivo, destacan los aromas de fruta blanca y fruta con hueso, con aromas florales, ligeros citricos y amielados, toque mineral.

  En boca tiene cuerpo, con gran frescura y acidez, predominan las notas de fruta con hueso recordando el melocotón y unas ligeras notas de la crianza que aportan complejidad, notas florales, toque goloso. Final largo y muy disfrutable. El precio mas cerca de los 10 euros que de los quince.