Probé el Lusco 2003 en botella Magnum y abierto del día anterior, bien conservado.
Botella bien vestida, etiqueta discreta pero bonita
Visual: Amarillo verdoso. Cristalino.
Nariz: Ataque generoso lleno de matices: membrillo, marroquineria, notas minerales, miel, frutos secos (almendra) y torrefactos.
Boca: Ataque menos potente que en nariz. Aun mantiene una sorprendente acidez. Vuelve a salir notas de miel, torrefactos y minerales. Postgusto no muy largo y con un sutil toque final de especia (pimienta)
Me gustó mas en nariz que en boca.
Probar un albariño del 2003 a finales del 2009 y que mantenga el tipo de forma tan noble, es digno de admiración, porque demuestra el buen quehacer de la bodega.

Mucha intensidad en nariz, con notas muy minerales, hinojo, hierbabuena. Serio y elegante. En boca vibrante, muy buena acidez, amplio, algo falto de longitud. Algo mejor en nariz que boca. Aún así una excelente expresión del albariño más mineral. Fue el Lusco que más gustó colectivamente y a mi personalmente en la vertical que hicimos la peña la verema de seis añadas (del 2000 al 2005). Está en un excelente momento de consumo.