De evolución, poca. Aromas de cartón húmedo, paso en boca con taninos desagradablemente marcados. Para nada agradable. Es la cuarta.

Vaya qué cosas tiene ahora este vinito del priorato. He tenido la ocasion de probarlo con un buen amigo -lamento no coincidir- pero no me deja impresion alguna. Chiquitito en nariz con una rapida nota de albaricoque o limones dorados, un poquito de ron al paso almendras y una acidez poco evolutiva, pone una señal de amargor, la fruta es como algo madura, algo viejita y sabores nada emotivos.
Tal cual una pera caliente, algo de las especias y de la madera y tras un ratito de espera: nada! Hemos hablado al paso del vino y coincidimos en sabores de levaduras, harina mojada, pasteleria o lacteos nada elegantes.
No es un vino para mi iglesia y desde luego no puedo compararlo con otros años, lo bebo ocasionalmente y con ciertos compromisos de amigo.

Uhm... aviso para navegantes. Color oro viejo, los aromas poco más que vainilla con licor... que miedo!... pero es que ha sido con dos botellas seguidas. Que decepción. Puntuaré al ver la evolución.

Parece que la evolución de este vino lo va cerrando. Se mostró arisco al principio. Mostrando tan sólo mineralidad, piedra caliza... me recordó a ciertos Chablis que he probado. Después de trabajarlo bastante despliega toda su gama de aromas. Quizás mejor decantar. El paso en boca con nervio, y el retronasal mostraba clara notas de mantequilla, tostados y especias. Habrá que seguir su evolución.

Dorado con destellos ambar.
toques florales,notas de miel de romero y cera blanca y un toque lacteo de fondo.
con una entrada muy potente y personal,tiene sabores de mantequilla y heno,recuerdos de melocoton en almibar y un fino toque tostado.

En esta ocasión, esta botella muestra un contenido algo más evolucionado. Color amarillo dorado, aromas de reducción que sin embargo se abren voluptuosamente, especiados, cítricos, etc... Paso en boca con amplitud, la barrica más marcada que la anterior botella. En conjunto muy rico.

Soy un adepto a este vino, aunque en este momento le falta algo de botella, digamos que tiene esa explosión empireumática de la estancia en barrica y que debe de integrarse más con el tiempo. La nariz es compleja y tiene desde notas melosas, vegetales, de albérchigos, melón de verano y membrillo, hasta unos finos tostados y empireumáticos que incluso en su final recuerda al palo de regaliz. En boca es rico, meloso, glicérico, con adecuada acidez y un paso lleno de matices de frutas verdes con sus hollejos ( que dejan pequeñas sensaciones vegetales ), mandarina y bergamota madurita. Aspectos por retronasal de cáscara de limón rayada y miel, flores blancas, vegetal y frutas maduras, con una acidez perfecta en el posgusto, que se aleja dejando un leve recuerdo amargoso ( piel de albérchigo ). Vino muy personal.

Buf, magnífic vi, encara jove, és clar. Afegir, que com altres anys té una part criada en barriques de roure hongarès. Color groc daurat, brillant. Aromes reduïts al principi, però després molt fruitals, pomelo, plàtan, pinya, fruits tropicals i cítrics en general, especiats, pebre blanc, gingebre, lleument torrats, melosos.... Pas en boca ampli, i fruital, la barrica hi és, però no tan marcada com en la joventut d’altres anyades. Retronassal magnífic, bona persistència i millor record. Cal donar-li temps, però sembla una bona aposta.

Dorado con destellos amarillos. Limpio y brillante. La nariz es intensa, con volumen y notable personalidad, densa y atractiva. En estos momentos la madera aparece en primer plano y viene acompañada de toques de miel de acacia, piel de naranja escarchada, algo de manzana compotada y recuerdos a flores amarillas, alguna nota de mantequilla y suaves tostados. En boca tiene buen ataque, potente, con un paso algo maderoso, con densidad, maduro pero fresco merced a su buena acidez, excelente estructura y notable recorrido. Retronasal mineral. Como comenté en la añada previa, le sobra raza y le vendrá muy bien la evolución en botella.