Granate de campa media, brillante y limpio. Aromas integrados y elegantes. Un bouquet redondo donde no sobresale ningún matiz por encima de otros. Fruta negra, regaliz, sotobosque,etc, son algunos matices más destacados en boca. Tanino elegante, buena persistencia y acidez equilibrada con un final de cierta calidez. 

-Fase visual: Color rojo cereza, ribete morado, capa media alta, lágrima media densa, límpido y brillante.

-Fase olfativa: Franco en nariz, aromas de fruta negra en licor, intensidad media alta, oxigenamos el vino en la copa agitandolo y percibimos aromas minerales, especiados, clavo, canela, vainillina, regaliz negro, pimienta negra, hierbas de monte bajo, romero.

-Fase gustativa: Entrada algo potente, seco, acidez media, tanino pulido, alcohol algo cálido pero nada agresivo, con cuerpo, sabores de fruta negra en licor, hierbas de monte bajo, romero, hojalasca, especias dulces, mineral, final algo ahumado vegetal y un poco amargo, posgusto largo.

Vino tinto Monastrell Fuego Lento 2018

Vista:

Color rojo granate intenso con ribetes violáceos.

Capa alta.

Limpio y brillante.

Aroma:

Intensidad alta.

Predominan las notas de fruta negra madura, como ciruela, mora y frambuesa.

También se aprecian notas especiadas, como pimienta negra y vainilla, y minerales.

Boca:

Entrada potente y envolvente.

Paso medio-completo con taninos maduros y sedosos.

Acidez media-alta que aporta frescura.

Final largo y persistente con notas frutales y especiadas.

Recomendaciones:

Servir a una temperatura de 18-20 ºC.

Acompañar con todo tipo de carnes rojas, caza mayor y quesos curados.

Rojo granate de capa media alta,

Nariz balsámicos, tomillo, romero, algarroba, fruta madura ciruela, caja de puros, tabaco, sándalo, cedro, incienso.

En boca es seco, potente, acidez viva, estructurado, carnoso, cuerpo

Final largo, monte bajo,

Color rojo picota y capa alta.

I.A. media, aromas a ciruela negra madura, licor (kirsch), pimienta negr, canela y enebro.

En boca tiene buena acidez, es franco y complejo, el tanino está presente y agradable, es amplio y persistente,

Color rojo granate de capa alta, limpio y brillante, con lágrima densa.

En nariz presenta buena intensidad aromática, complejidad y equilibrio, combinando la fruta negra, y las hierbas aromáticas con los especiados de la madera (vainilla, pimienta negra, clavo), cacao, tabaco y tostados

En boca muestra un gran equilibrio entre la acidez y el tanino, resultando estructurado pero sabroso, con gran persistencia aromática y gustativa.

Color rojo picota de capa alta, límpido y brillante, deja la copa llena de lágrimas densas.

Es de un aroma concentrado de carácter frutal negro, se muestra en inicio sereno y elegante. Equilibrio entre las notas de la crianza, hay vainilla, clavo y pimienta negra junto con café torrefacto. Las frutas son mora, ciruela y arándano, hay sinergia, se muestra todo bien conjuntado. 

La entrada en boca es redonda, aunque el tanino marca enseguida con carácter y garra, nobleza y acorde a las variedades. A la par, la acidez te agarra y hace que lo paladees, palpas y muerdes la fruta con tanta frescura como con una rica madurez. La fina crianza muestra un equilibrio agradable, queda tramada en el conjunto, formando una sensación placentera. Es un vino que sabe agradar a tod@s pero con argumentos. 

Al descubrir la botella me alivia pues la añada anterior, bajo mi criterio, bajo mucho las expectativas anteriores, vuelve a la buena senda.

Intenso. Atractivos aromas de fruta negra licorosa y cereal malteado. Tabaco rubio, monte mediterráneo y pimienta. Fondo complejo de cacao puro, regaliz y lacas ligeras. Sensaciones pulverulentas agradables. Final de nariz de flor y naranja seca. Sabroso en boca, con sorprendente acidez. Conjunto equilibrado, con capacidad de evolución y gran presencia.