Mi amigo Sigfrido me ha traído a casa esta botella la cual le han recomendado y por lo cual le estoy muy agradecido, je,je... Veo que tiene 15.5% de grado...impone respeto. Abrimos la botella y dejamos atemperarse a 16°C por espacio de una hora. El corcho perfecto, largo, limpio y muy compacto, de buena calidad.

VISUAL: Espectacular color rojo picota de capa alta no...lo siguiente. Con el ribete violáceo muy brillante. De lágrima abundante, fina, densa y tintada (94).

OLFATIVA: En nariz encontramos una intensidad impactante. A copa parada hay mermelada de higos y recuerdos tostados. Al agitar surgen notas de guindas en licor, más fruta en compota, moras y arándanos, potentes balsámicos de eucalipto, castañas asadas, regaliz, zarzamora, especiados de pimienta negra y clavo y elegantes aromas terciarios: finos ahumados, cuero curtido, chocolate negro y café torrefacto. Increíble nariz, delicioso y complejo bouquet (92).

GUSTATIVA: En boca se alza un coloso de ataque bestial, denso, muy carnoso, amplio, de acidez descomunal y taninos verdes, muy marcados. Un vino con mucho cuerpo, estructura de elefante, grueso, armónico y regio. La verdad es que esa elevada graduación alcohólica no se aprecia en demasía, lo cual se agradece, queda muy integrado. En retronasal de nuevo fruta en compota, ciruelas e higos, notas de uvas pasas y ese recuerdo a finos tostados de la barrica. La persistencia de casi 4 minutos. Un vino de los que imponen respeto, de los que le le gustan a Parker, potente es poco, omnipotente si me permitís. Me recuerda mucho a los vinos de Toro. Sin duda para guardar por 5 o 10 años sin despeinarse (a ver si suaviza esos taninos) aunque en este momento está colosal. La verdad es que me ha encantado, gran vino de Almansa, sí señor! (92).

La RCP la considero muy buena. Está en torno a los 10 euros y se trata de una garnacha espectacular.

Acompañamos este vinazo con un entrante de camembert con mermelada de moras y de plato fuerte un arroz caldoso de langosta de esos que quitan el hipo. Maravilloso matrimonio, con el queso y las moras pura armonía y con el caldoso algo sublime. La potencia del vino estaba a la par con la intensidad de los aromas del marisco, se compenetraron a la perfección. Un gran descubrimiento del cual tomamos nota. Gracias Sigfrido por traer hasta Ecuador este vinazo y compartirlo. Salud-os!!

Rojo picota muy oscuro, ribete rubí. Capa alta y lagrima gruesa bastante teñida. A copa parada, muy expresivo, tabaco, pan de higo. Luego, fruta roja en compota. En boca es denso, muy amargo, astringencia marcada. El final es muy largo, algo espirituoso, muy amargo, regaliz y Fernet Branca. Sabor predominante a fruta negra y regaliz. Fuerte, potente. Para adeptos.
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