De color rubí marronoso de capa media, muy claro, translúcido. Reflejos ambarinos y cobrizos, brillante, limpio aunque presenta un fino precipitado en la base de la botella. Borde amplio, atejado, sin diferencias respecto al menisco.

Un Berberana decididamente clásico, sin sorpresas en las formas: sobrio, ordenado, preciso. Se presenta algo tímido aunque equilibrado, vallado en vainilla fina y un detalle vegetal de fondo a tripas de habano y caja de puros. Ligero, de poca intensidad pero entallado con elegancia. Agradece que le demos tiempo para que pueda ir sacando notas de flores ajadas, granos de café y un detallito de maderas viejas y envinados de calidad. En la línea de los antiguos vinos de la bodega.

En boca es seco, limpio, con poco peso, ágil aunque lejos de ser un vino diluido o sin fuerza. Tiene el encanto de la ligereza y se intuye un grado alcohólico escandalosamente bajo. Qué maravilla!! Con más tiempo gana presencia, se especia. Quizás le falte el lucimiento de los gran reserva "gemelos" del 58 y 59 pero junto a ellos forma un trío irresistible que muestra la capacidad de Berberana de producir vinos fiables año tras año. Un tinto civilizado de Rioja, de los que se echan de menos en la actualidad. Se encuentra asentado en una meseta del que no se divisa un horizonte próximo. No parece que vaya a venirse abajo en un montón de años.

Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2015/04/berberana-1960-gran-reserva.html