El vino que, según su elaborador Marc Bournazeau, su elaborador, está concebido desde el principio para transmitir lo mejor de la bodega Terra Remota.

A la vista se presenta con un atractivo color granate con ligeros reflejos teja, limpio, brillante, con abundante lágrima. En nariz es compejo, con notas típicas de la fermentación (lácteos) y la crianza en barrica (ahumados, trufa, toffe, vainilla, pimienta) entremezcladas con aromas de frutas negras maduras (ciruela, mora), grosella, hierbas aromáticas y toques minerales. En boca es elegante y largo, amplio y con peso, con taninos bastante pulidos con recuerdos en el postgusto a frutas confitadas y bollería fina. Un vino con un toque muy personal de la bodega. Producción limitada de 1200 botellas con un PVP aproximado de 149 euros.

De color rojo cereza intenso con ribete granate vivo y lágrima bien formada y abundante.
Nariz algo láctea de inicio, con presencia de moras y ciruelas negras maduras, toques de grosella roja y hierbas de monte aromáticas sobre finas notas de vainilla y pimienta, elegantes ahumados de café tostado, trazas salinas y fondo mineral. En conjunto se muestra muy limpio y afinado, con recuerdos de terruño.
En boca responde bien, es amplio, ligeramente especiado, con tonos ahumados, regaliz y chocolate negro dulce envolviendo una fruta bien sabrosa en confitura. Sutilezas de mantequilla, sensación algo salina al tacto y mineralidad fina. Tiene un paso de boca sedoso, fresco y muy equilibrado en acidez y taninos, dejando un largo y elegante postgusto de confituras y café.