Relación entre corcho sudado y malos olores en el vino
En, al menos, tres ocasiones me ha pasado que, en botellas en las que el corcho estaba sudado o lagrimeaba, el vino presentaba olores a animales, a carne, bastante desagradables. Intenté eliminar estos tufos mediante el decantado pero no fue posible.
Quisiera saber si hay una relación causa-efecto entre este suceso o es simplemente casualidad.
Tengo entendido que estos aromas animales, a carne pasada, son tufos de reducción. Si el corcho lagrimea, podría entrar algo de aire en la botella y, en todo caso, lo que se produciría sería una oxidación no reducción. Por tanto, me parece un poco contradictorio.
Asimismo, tengo la duda si estos aromas animales son entendidos como un defecto del vino o no.
Agradecería que alguno de vosotros pudiese aclararme un poco este asunto.
Gracias!