Pues cómo evoluciona en suavidad y elegancia este champagne. Todavía tiene la acidez que te llena la boca y te hace ensalivar, pero mantiene su cremosidad y es muy agradable. Un champagne vinoso, muy frutal, aparecen los tostados y la bollería. Muy rico

Ya prometía hace unos años y tomado en el dia de Navidad se nota el progreso y la elegancia. Mantiene la acidez que te llena la boca y te hace ensalivar de forma muy agradable. Un champagne muy intenso, vinoso, muy frutal, con unas buena notas de tostados y con buenos recuerdos a bollería. Un buen champagne rosado que desde el color bonito a piel de cebolla, sus aromas intensos frutales y su sabor vinoso da mucho placer.

Catado en Magnificat. Color salmón brillante y con destellos anaranjados. La nariz es intensa, expresiva y muy bien definida. Bastante vinosos la fruta roja aparece fresca y crujiente -sensación que refuerza el paso por boca-, hay flores rojas e incluso algo de moradas, suaves tostados y un fondo más maduro con bollería fina... En boca destaca su cremosidad. Intenso, vinoso, con profundidad y muy bien perfilado. Un rosado que aporta mucho placer...

Rosé probado en la cata de la maison de Louis Roederer en el Celler de Gelida de color muy bonito, piel de cebolla asalmonado, brillante con buena espuma y pequeñas burbujas. En nariz aromas intensos a frutos rojos, tostados y flores. En boca entra muy bien, potente y elegante, una acidez presente, que te llena la boca y te hace su sabor más largo. Muy buena integración del carbónico. Puede que sea el que más me haya gustado, junto con el cristal 2004.

Color rosa con tonos salmones, limpio, brillante, de burbujas muy pequeñas y finas, que suben muy lentamente sin formar corona
Nariz muy intensa destacando , por encima de todo las frutas rojas, flores , con una base de tostados y ahumados
Muy buen paso por boca con potencia y una acidez excelente, con integración muy buena del carbonico.
Postgusto muy largo