Un buen exponente de la Ribera del Duero y al que en este caso también acompaña un precio contenido, algo que no siempre ocurre en esta DO.
Un vino de color cereza intenso con borde granate y capa alta. La nariz es potente y profunda, rica en expresión frutal, con una mezcla de frutas rojas y negras, más presentes estas últimas. También aparecen los tostados de la madera en intensidad media-alta, pero sin molestar. En boca tiene recuerdos a lácteos, es muy sabroso, con un puntito graso y el tanino aún por terminar de redondear, aunque ya está en un momento estupendo de consumo. Fantástica RCP, 15 euros en tienda. Un Ribera muy recomendable.

Aroma complejo en el que se mezclan la fruta roja con las especias dulces, los balsámicos y el monte bajo, quedando al final con la aireación aromas de café con recuerdos tostados. En boca es goloso, muy amplio. Un vino que tiene una verticalidad que contradice lo que se espera por la nariz. Entra suave, para ir ganando volumen y apoderarse de la boca. Bien estructurado y fresco. Posgusto largo, con amargos elegantes.

Color rojo purpura con ribetes morados y colores de bermellon entremezclados, muy, muy elegante en copa. Capa alta.
En nariz es muy profundo. Tambien hay aromas herbaceos, helechos, hierbas, y mucho tomillo, hay ribera de Duero.
Boca comienza bien, pero la tanicidad esta poco afinada, y los tostados tardios, cuestan amanecer. la fruta roja es escasa, quiza negra madura, con falta de evolucion.
Creo que puede mejorar.

Nos desplazamos a Pedrosa, donde detrás de la mesa nos encontramos a uno de esos elaboradores con carisma, alma de la bodega, me refiero al Sr. Carmelo Rodero, quién patentara un innovador proyecto de elaboración por gravedad, donde no se usa ningún tipo de bombeo. Partiendo de 103 hectáreas en propiedad y una diversidad de vinos que muestran todo el carácter de la Bodega y su propietario. Carmelo nos dispuso hacia un paseo por sus cuatro vinos de alta gama y más cuidado, todos con su personalidad y perfil para asociarlo a un momento, empezamos las andanzas por Carmelo Rodero Crianza 2008 una de las referencias RCP sin lugar a duda de la Ribera del Duero, un vino que gana fruta respecto al 2007, cediendo el protagonismo inicial de la barrica, para preservar los aromas frutales.

Cata realizada en el Salón de los mejores vinos de España Guía Peñín 2012. Artículo con la cata de todos los vinos en http://www.taninotanino.es/posts/partitura-iii-del-salon-de-los-mejores-vinos-de-espana-guia-penin-2012