Excelente este vino alentejano, a un nivel francamente alto y de una gran elegancia. Vista dorado, denso, glicérico. En la nariz te da un primer golpe con aromas de mantequilla y frutos secos y pan tostado. Poco a poco va perdiendo al timidez y muestra fruta de calidad (manzana madura, pera, albaricoque, frutas tropicales y un fondo cítrico) junto con notas anisadas y herbáceas.

En boca es graso, muy goloso con buena acidez que equilibra el conjunto y un final largo y elegante donde vuelve la fruta blanca y toques especiados. Y todo por 11€

Botella borgoñona de bonito diseño y etiqueta.
Presenta un bonito dorado brillante.
Nariz muy frutal en que se aprecia fruta tropical, cítricos, herbáceos y ligeros tostados.
En boca hay fruta madura, tostados bien integrados, toques mentolados y fina mineralidad. Excelente acidez, frescura en el posgusto y untuosidad. Lleva su grado con muy buen estilo.

Excelente blanco del Alentejo que puede acompañar tanto a pescados como a carnes, como quesos...

Bonito color amarillo oro brillante con lágrima densa, glicérico y es que el vino tiene 14.5 º.

En nariz expresivo, cítricos, mucha fruta tanto con hueso como tropical, algo de pera, naranjas y algún toque ahumado y tostado aunque ligero de su estancia en barrica.

En boca no parece un vino de esa graduación alcohólica porque es un vino suave, goloso, muy afutado, de un paso excepcional y suave por paladar, untuoso, elegante y con una acidez excelente. Todo muy bien conjuntado con las notas procedentes de la madera que equilibran todo el conjunto.

Personalmente me ha encantado, la pena es que no sean vinos fáciles de conseguir.

Amarillo dorado claro, brillante con reflejos verdosos.
En nariz predominan las frutas blancas, yogurt de plátano, vainilla, anis, heno, algo de madera verde(pino).
En boca resulta fresco, con una acidez correcta, buena intensidad, fruta blanca madura vainilla y ahumados. Resulta aún algo astringente, con la madera demasiado presente.
Bastante bien, pero necesita afinarse en botella.