Tiena algo de fragil, fruta fresca, recien exprimida, con notas de frambuesa y un ligero recuerdo de tabaco, alguna nota balsámica, hay tostados y tienen un recorrido suave, con notas de caramelo y final justito. Más curioso que notable.

Rojo cereza de capa media-baja. Algunos rosados modernos tienen casi este color.

Este peculiar vino asturiano tiene una sorprendente y agradable nariz de fresas, frambuesas, violetas, ... muy floral y delicado.

En boca es un vino sútil, liviano. Con frutilla roja, cuerpo frágil y final inminentemente ácido. Un vino de perfil atlántico que podría pasar por un Côteaux Champenoais tinto, un pinot noir alsaciano o del Loira.

Elegante y delicado, sútil. No gustará a los amantes de las bombas frutales y los vinos de 15 grados. Unos 11 euros.