Un Rioja corre trillo, que entra bien, pero poco más. Lo tomé en un restaurante de tapas en Cornella. Color rojo cereza, con borde violaceo. En nariz aromas a fruta roja y leves tostados. En boca entra bien, es suave, poco intenso, se nota más la madera que la fruta, y una poquita acidez. No muy largo pero se deja beber. Ah! Veo que no han quitado la do rueda del titulo, cuando es Rioja.

Color rojo rubí de capa media. Lágrima muy ligera y poco perceptible en la copa.
Nariz de media intensidad. Aquí, lógicamente, se adivina la procedencia del vino. Su DNI. Inequívocamente riojano: fruta roja (guindas, algunas moras rojas...), notas especiadas; el sempiterno aroma de la madera en forma de caja de puro, tabaco...
Las primeras copas, marca mucho la pimienta negra. Luego, parece la fruta querer luchar con la madera por hacerse sitio, cosa imposible pues ésta ultima está demasiado presente.
Lo mismo sucede en boca. Entra dócil, pero alcohólico. Paso fluido con poca consistencia. Ramalazos de fruta fresca a falta de madurar...y la barrica. Madera, mucha madera.
Desde luego, se puede relajar este tinto en el tiempo, a base de guardarlo. Pero nos dará para lo que nos dará.
Eso sí: por unos míseros 4 eurillos y pico, bastante "apañao" está.

Típico, previsible; normalito.