Lo pude catar esta semana en una vinatería especializada en Rioja aquí en Gijón. Ya cuesta ver otros vinos aparte de los más distribuidos y comerciales y mira que tenemos DOs y la madre que las que la parió pero nada, vamos a lo fácil, a tener los 4 vinos de siempre.
No dudé en pedirlo y no me desagradó para nada.
De entrada me parece emocionante que una bodega apueste por sacar una serie de "monovarietales" y más aun por recuperar variedades.
Este grupo de bodegas enclavados en la navarra Mendavia pero de la DOc Rioja, anuncia la maturana como "la uva autóctona casi perdida". Pues eso, no hay que perderla. En Rioja tienen la suerte de tener cierta extensión de viñedo o sea que se puede permitir el lujo de cultivar maturana.
Yendo a la cata destaco la capa más que alta, altísima, color muy púrpura rozando el negro, lo que da idea que estamos delante de un vino con carácter y personalidad.
En nariz nos da notas de crianza, destaco tabaco, puros y balsámicos.
En boca el ataque no es agresivo, fresco, cierta astringencia y algo subido de acidez propias de la variedad.
Particularmente no me agradan los vinos ácidos pero la variedad es la que es.
He encontrado bastante tipicidad que es lo primero que buscas.
Un vino muy correcto en el que hay alabar el esfuerzo de la bodega por sacarlo al mercado.