Color amarillo pajizo con ribete verdoso.

En nariz es de buena intensidad, destacan en principio los aromas herbáceos ( hinojo, anisados ), la fruta es tropical (piña) y citrica (pomelo), cierta salinidad y mineralidad.

En boca es de cuerpo medio, con buena acidez, muy fresco y aromatico, con carácter de fruta citrica, en boca le sale mas la variedad xarel.lo con las notas herbáceas y la fruta cambia de tropical a fruta blanca, final largo.

Mandan en el copage la xarel.lo principalmente y después la macabeo. Su precio es de aproximadamente 6,50 euros.

...Y completo. Digo todo esto porque realmente este blanco ofrece una buena variedad de matices con toda esta reunión de variedades autóctonas catalanas.
¿El resultado? Bueno, pues nos encontramos un vino que nos ofrecerá una buena diversidad de detalles, sobretodo en nariz aunque, eso sí, de forma algo sutil.

La cata:
Aparece en la copa con un amarillo pajizo claro.
La nariz pasa por ser una de las fases interesantes de este vino: Se aprecia el coupage (ya daba a conocer mi desconocimiento en el porcentaje exacto, pero parece que la Xarel.lo y la Garnacha si disputan a base de bien esta fase: ramalazos minerales, fruta blanca( pera?). Toques balsámicos (muy garnacheros), anís, hinojo...Todo "apretado" en conjunto. Aún así, le faltaría un poco más de definición y, sobretodo, intensidad.
En boca, mantiene buen nivel de acidez (al final del trago). A pesar que esos 12,5 grados parezcan poca cosa, la realidad nos acerca a un vino cálido y alcohólico.
Nos falta algo más en boca, para que este vino nos acabe de convencer plenamente.

Con todo y con eso, creo que resulta una opción para aquellos que quieran huir del tipismo varietal de la zona (por ejemplo, más monovarietal) y busque cosas más diferentes.
Acepto esta nariz....Pero espero otra boca...Más boca.