PEQuE

En mi caso, lo que lleva más tiempo conmigo es mi mujer ;-P

Aquí el que suscribe tuvo dos gloriosas de atracones... amaprado por mi abuela (que esto pasa hoy en día y la encierran por "tentativa de infanticidio"). La primera de ellas fue a base de gachas... dos platos me comí con 5 años. Huelga decir lo que pasó cuando vino mi abuelo con un coche nuevito y nos fuimos a estrenarlo... pues eso, que se lo estrené. Otra, teniendo 4 años, fue cascarme un plato bien largo de caracoles a la madrileña. Estos sí me sentaron bien, sí...

Otra anécdota fue, ya mayorcito (9 años o así), fuimos a comer a "Combarro" (restaurante marisquería en madrid) para celebrar un cumple de mi padre. Pedí pescado, creo que dorada pero ya no recuerdo el detalle. Me la presenta el camarero y, muy formal él, dice a mis padres: "¿se la limpiamos?" (ya cocinada, claro). Obviamente la respuesta debió ser: "sí gracias" y me hubiesen puesto los lomitos limpios, con su guarnición y demás. MI respuesta no fue la debida sino: "sí, me parece bien, pero me la dejan así". La cara de mi padre de "tierra trágame" era un poema, mi madre se tronchaba por lo bajo y el camarero, que no esperaba esa respuesta, ni te cuento. Cuando me apuré la dorada, se acerca el maitre (¿podemos decir "maestresala" para usar una palabra española bien bonita? y nos dice que si no me ve limpiar la dorada no se hubiese podido creer que un niño tuviese esa habilidad. No volví a decir que me dejaran un pescado sinb limpiar allí y, con esas habilidades, siendo veterinario, no me quedó más remedio que dedicarme a la cirugía...

Un saludo,
Adolfo Benavente

Adolfo, eres un genio. Y yo que a mis cuarenta y diecisiete (como dice la canción), todavía pido rodaballo en lugar de dorada por el tema de las espinas?

Pero no la llevas a las catas, verdad? (no cuenta ;) )

Un abrazo amigo...

No cabe duda que lo que hacemos de niño, lo seguimos haciendo de adultos. Yo soy malisimo para comer pescado, me gusta fileteado, fileteado. Recuerdo un dia que nos comimos unas sardinas frescas, tenian como un millon de espinas. Comio junto con un amigo que era de Bolivia y la dejo limpia quirurgicamente...

Saludos desde Tijuana...

¡Muy bueno! El pobre hombre no debió dar crédito. Seguro que te pasa hoy, y te graban en video ;-)

Según cuenta mi madre, a nosotros nos pasó algo similar con una naranja. Con más o menos 6 años parece ser que pelé una con cuchillo y tenedor. No lo recuerdo... tampoco el suceso :-D Igual por eso me dediqué a la contabilidad ;-P

Pero en casa soy yo el que emplata el pescado, incluido el rodaballo :-)

No la llevo porque no quiere. A Haro sí que vendrá... a ver que tal se lo pasa :-)

En Madrid, sólo fue a una cata. Se pasó todo un día visitando a unos amigos en un pueblo cercano... ¡Menudo plan! :-D

Yo creo que es bueno que no nos sigan tanto la onda, pero si a veces quisiera que fuera un poco menos abstemia. Eso si, ya viste, los vinos de postre la enloquecen, como ese Moscatel de Alejandria que probamos en BCN aquella magnifica noche.

Un saludo desde Tijuana...