Rafael García Santos: “La alta cocina se verá reducida a una élite “

No crees tu, que el dinero ahora va a ir por la cocina menos evolucionada?

Igual esa es la explicacion.

Saludos y feliz Navidad

Cada vez que habla este tío, sube el pan.
O sea, que al final los grandes cocineros son culpables de la falta de vocaciones de sala o cocina; Vamos, anda!
Lo que le pasa a este tipo es que su Congreso, que es lo que le da de comer, ya no pita como antes; que hay congresos que le han ganado por la mano. Y de hecho, y lo sé de buena fuente, se está replanteando todo el tinglado que tenía montado.
Además, ¿de qué habla un tío que considera que la Alta Cocina de raíz tradicional no tiene cabida en el circo que él ha contribuido a crear?
Insisto, la aportación intelectual de gente como esta no aporta nada nuevo. Ahora resultará que es una novedad que la alta cocina se restringirá a una élite. Para información de García Santos, son estadísticamente irrelevantes los comensales que se pueden permitir cenas en Per Se, Ducasse, Can Fabes o Berasategui a 250 € por comensal. Y que conste que soy de los privilegiados que disfruta de este tipo de sitios. Pero, señor mío, eso no es noticia.
Lo dicho, todo lo expuesto por García Santos hay que pasarlo primero por el coeficiente corrector de su interés comercial. Que ya somos mayorcitos, oiga.

Los que lo conocemos ya sabemos el pie que calza el RGS.
Totalmente de acuerdo con tu comentario.

O es que alguien se cree que los Santamaria, Ducasse, Adriá viven de lo que les da el restaurante ? Es un mero escaparate para vender otras historias y punto.

Creo lo mismo que los posts posteriores al mío. Exactamente lo mismo.

En este hilo pasa como con todos; hay que esperar tres páginas para que se dibuje la versión mayoritariamente aceptada; pero sale al final, y está clara.

Sí que es verdad que ningún gran cocinero vive de su restaurante; os recuerdo el bochorno televisivo de Sergi Arola, o la boutade de Santamaría para vender su libro, o el programa de radio de Carme Ruscalleda, o tantos otros que colaboran en tv como Nando Jubany, por ejemplo..
Sí que es verdad que no son capaces de formar grandes equipos, pero no por su culpa, sino por que este mundillo se ha quemado y la hosteleria profesional es dura, esclava, tacaña con los salarios y a menudo conceptualmente insoportable con tanto pretencioso corriendo por ahí. Los jóvenes no aguantan este tipo de relación y dedicación; yo tampoco lo haría.
Sí que es verdad que al final se convierte en un cruce entre un mercado real de disfrute (muy pequeño) y otro irreal que está entre el regodeo y la ostentación (muy ligado a las visas de empresa y a las comidas de negocios, y mucho más abundante).

Con todo esto por en medio la crítica que se pueda hacer tiene demasiadas variables, oscuras todas por los intereses que las motivan. No es posible un juicio objetivo si no es este que se extrae de entre todos nosotros.

Por mi parte, la última comida que considero de alta cocina fue la que hicimos hace unos meses cuando entrevistamos a Xavier Ausàs. Un lugar que parecía que iba a proponernos virguerías, en Tudela de Duero (maldita memoria, el nombre...), y al sentarnos le preguntamos a Xavier, "¿Qué hay que comer aquí?"; sin dejarla botar nos dijo "asado, ¿qué si no?". Era excelente, más aún con los vinos, claro. Deberíamos haber llamado a RGS. Eso era alta cocina.
Sencillo, género excelente y trato correcto, nunca empalagoso ni pelotillero, tampoco distante ni insultante; tengo más que suficiente. Es ese equilibrio entre el entorno, el trato, la calidad y el precio el que me convence por que es próximo y accesible, humano. Lo demás me sobra.

Saludos a todos Jordi

Poca broma con la cocina casera. Cada vez hay menos gente que sepa preparar una paella, un fricandó, unos callos o un marmitako. Triunfan las tiendas de comida preparada, especialmente los fines de semana y por fiestas.

Está muy bien ir al restaurante de moda, pero sin olvidar los orígenes. La comida de la abuela.

La mayoría prefiere trabajar más y cocinar menos. Parece que la cocina casera no compensa.

Ya lo dije en otra ocasión: https://www.verema.com/foros/gastronomia/temas/552818-olores-y-sabores-que-por-sencillos-estan-casi-olvidados-?page=3#respuesta_553199

Mientras mi cartera lo permita, seguiré estando en la elite, aunque sin renunciar a los platos de toda la vida.

Lo cortés no quita lo valiente...

Saludos

Ante los pocos seguidores , que al leer los comentarios se desprende, Garcia Santos

"Dicen los expertos que la función del crítico es informar al público, otear el horizonte culinario y gritar: ¡aleluya!, ¡aleluya!, cuando descubre un cocinero con talento. El descubridor se ocupará después del descubierto y lo encumbrará hasta hacerle rico y famoso y cuando esto ocurra el cocinero abandonará las tarteras y se dedicará a firmar libros que otros escriben para él, columnas que negros mal pagados se sacan del magín, enjundiosos estudios de sociología culinaria que escritores a sueldo componen para mayor honra del nuevo príncipe de los fogones. O sea, el cocinero emblemático, cuando triunfa y se convierte en un santón, deja de ser lo que era para empezar a ser lo que nunca será."

¿Que os parece este comentario que lei hace un tiempo?

¿Os hace evocar algun nombre?

Desde luego, vaya mala leche.

Bocusse, Ducasse, Adrià, Berasategui, Arola, Santamaria,... son los que me vienen a la memoria. Hay cocineros menos conocidos, pero que también viven de las rentas. Lugares que hace 10 ó 15 años eran muy buenos, y todavía recogen los frutos. No es el único, pero el Bar Tomás de Sarrià me acaba de venir a la memoria. O El Caballo Rojo. Igual es verdad que falta capacidad intelectual para innovar.

Uno de los cocineros famosos que creo que sigue siendo fiel a sus principios es Arzak.

Me parece que fue Alternativa la que dijo hace algún tiempo que los estudiantes de cocina pensaban más en llegar a ser Adrià que en cocinar. Crudo lo tenemos si se confirma lo anterior.