Accediendo al público joven

Así que el Yellow Tale Merlot ganó en una cata a ciegas??? sube la cata!!!

La base está en la base, parece simplista lo se, pero es absolutamente certero. La solución está a partir de ahora, no puedes reprochar a nadie a estas alturas el que los espumosos estén asociados a determinadas festividades, es la huella que ha quedado. Está en que los que vienen detrás te vean comer con él, valga para todo tipo de vino, y tratarlo con naturalidad en casa, lejos de asociarlo simplemente a bebida alcohólica, educar en una palabra.
Estas fallas pasadas me gustó una publicidad del Icono que decía "el icono de las fallas", yo creo que destinada a la gente joven. Publicidad de este tipo hace falta para llegar a la juventud, lo que no podemos hacer luego es condenar ese vino por haber sido publicitado, que la exclusividad a veces nos mata, y encima luego nos quejamos, reconozcamos que a veces hipócritas si somos.
Intentemos ponernos a la altura de esa juventud que empieza y entenderles, todo les pasa por la vista, luego tiremos de parafernalia. A los de casa, buen mantel, buenas copas... a los bodegueros, botellas y etiquetas atractivas... ¡todo suma!.

La madera, la fruta, el alcohol, la nariz... Todo casi perfecto y muy agradable. Otra cosa es que el echar tablas al depósito no sea lo mismo que tener el vino en barricas, pero el resultado es similar.

Cura de humildad para los expertos catadores :-) en cualquier caso.

¿En cuántos bares o restaurantes tienes el cava por copas a un precio razonable? -pongamos razonable a 2.5€/copa tapa incluida-.
Si no das la oportunidad de probar, pues no hay nada que hacer, ahora si ofertas por copa Colet, L'Hereu, Elissia, Villarnau rosat, ... pues puedes crear un principio que genere más inquietud y de ahí a la curiosidad no va nada.
Claro que los israelíes tb han convertido el desierto en vergel, son la segunda potencia en patentes industriales, ... En fín hablamos de "otro" país.

Esta claro que el precio es un factor determinante. Otro es una buena y clara divulgación y, por último, quitarle al vino el lastre de tecnicismos y parafernalia. Nada de descripciones rebuscadas, catas pretenciosas ni herramientas sofisticadas. Hacerlo accesible (en todos los sentidos) es la única forma de evitar que quede en un reducto para pseudoenterados.

Me temo que no basta con eso... en Verema hemos organizado algún evento para gente joven incluso ligándolo con otros "ganchos" como la música rock (eno-rock)y pese al notable éxito de público sigo sin tener claro si logramos algún adepto a la causa.....

Demasiado pocos Mario, demasiado pocos......

Pues nada, démosle a los jóvenes un bota de vino a ser posible con taquitos de jamón dentro, yo pongo la boina. ¿O es que hablamos de parafernalias diferentes?