Esta es la realidad, pero hay unos cuantos factores más, como la vanidad y la

Esta es la realidad, pero hay unos cuantos factores más, como la vanidad y la envidia. En el año 1982 yo preparé unas jornadas del salmón y el cava que fueron un éxito en Madrid de tal calibre, que puedo afirmar que se abrieron las puertas al cava en la mesa en la hostelería madrileña. Al año siguiente, cuando estaba preparando las II jornadas, los cavistas aquellos, que se habían forrado, consideraron que ya habían triunfado bastante. Hoy esa marca ya casi no existe en el mercado español. El otro pecado es la envidia, si un cavista puede meterle un palito en los radios de la bici del compañero, ya verás como lo hace en plena curva, para que se desmorre contra el asfalto. ¿Como vas a plantear una campaña si cada batallón se dedica a tirotear a su compañero?