Dos copas son suficientes, mi querido amigo. Y este vino, elegante e

Dos copas son suficientes, mi querido amigo. Y este vino, elegante e intenso, te abanica la cara con unos aromas de resinas, cenizas y regalices; mentolados y tierra, un bonito despligue floral, flores secas, violetas y pétalos de rosas. Trufas y betun. Inciensos. Y la boca, carnal, vibrante, ansiosa, cobertura de chocolate. Cuerpo vivo, sabroso, con notas de fruta roja. Se funde en la boca, destacan trozos como de menta y bayas con hierbas aromáticas.
Ciruela pasa que da un toque ácido, y fondos de tinta y mucha materia puliendose. Todo, cada esquina y cada columna de su estructura maravillosamente integrado, con un equilibrio jónico. Soberbio. Largo. Final de piñones. Un toque de brea. Pura esencia de grosellas en la copa al final.
Ah, y ese toque de aceitunas...? No se lo pierdan ©

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar