Vemos en la carta de una terraza restaurante en Benicasim este vino de la IGP Castellón 100% tempranillo y nos llama la atención. Bonita presentación con una botella muy oscura, etiqueta negra con letras rojas y blancas de aspecto muy moderno. Nos pedimos una botella y nos la sacan de la vinoteca atemperada. Nos sirven a 15°C y catamos a 16-17°C.

VISUAL: De color rojo picota de capa media-alta muy brillante y limpio, con reflejos rubí y un ribete rosa violáceo. Su lágrima es abundante, fina y transparente (92).

OLFATIVA: A copa parada hay recuerdos a fruta madura, (compota de fresas y moras) con algunos matices florales (violetas). Al agitar el líquido encontramos notas especiadas de vainilla y canela, algo de clavo, apuntes vegetales aceitunados, recuerdos de montebajo y un toque a regaliz acusado. Al final aromas amaderados y de ebanistería. Intensidad alta y buena complejidad (88).
GUSTATIVA: Presenta un buen ataque, de gran amplitud, fresco, carnoso y amplio. Acidez alta y taninos a medio pulir que auguran un futuro prometedor en botella. Pese a su 15% alcohólico se muestra suave, lácteo y para nada agresivo. En retronasal de nuevo apuntes frutales y recuerdos de la barrica a duelas envinadas. Su persistencia es de casi dos minutos. La verdad, una grata sorpresa, un vino de las Useres, de la "millor terreta del mon" que no deja indiferente desde luego. Bien acabado y con potencial (87).

La RCP la considero muy buena pues cuesta poco más de 10 euros.

MARIDAJE: Nuestro caldo acompañó un plato de rodaballo sobre un lecho de champiñones para picar y un entrecotte a la brasa con patatas. Especial mención a la combinación con el rodaballo y las setas. La frescura y frutosidad de nuestro tempranillo armonizaron exquisitamente con los apuntes marinos y los fúngicos de nuestro entrante. Por supuesto con la carne nos encontramos con un maridaje clásico y muy acertado.

Salud-os!!