Color picota oscuro con ribete granatoso.

Se muestra algo cerrado inicialmente con notas que recuerdan a su crianza, tras airación frutas rojas y negras acompañadas de sensaciones vegetales que aportan frescura al conjunto.

En boca tiene buena entrada, sedoso, elegante en un paso amplio en el que las sensaciones frutales y vegetales dan contrapunto a una buena crianza. Final de buenos amargos y también longitud.

En un primer momento se señala el paso del tiempo con unas notas de fina crianza y otras sutiles de cuero y trufa. Al movimiento se limpia y conjunta, destacando ahora algo más la fruta negra y un poco la roja; sensación vegetal que le dota de frescura.

La entrada en boca es ligera y fresca, tiene una acidez cándida pero bonita, lleva al equilibrio sereno. Al paso se torna o se siente terroso, marca la fruta negra, el café recién hecho. Se bebe con agrado y rompe casi por completo con lo sentido en inicio en la fase olfativa, da un aire riojano agradable.

un vino sobresaliente que se bebe excepcionalmente y se disfruta como uno de mayor "nivel".

Color cereza muy oscuro con borde granaste y toques violáceos de capa media-alta.

Aromas de buena intensidad y de calidad, donde destacan los frutos rojos y negros con una maravillosa y sobresaliente madurez, balsámicos, finos tostados, hierbas de campo, flores y leves toques minerales. Bastante completa y variada la nariz.

En boca es sabroso y al mismo tiempo frutal, el paso de boca con buena estructura, equilibrio y redondeo, los taninos nobles y vivos, magnifico el retronasal con casi todos los aromas de la nariz, hay una buena acidez que no molesta en absoluto y complejidad y calidad en el recorrido, final largo y con buena persistencia.

Un vino que se bebe de maravilla, estoy plenamente convencido, que si la etiqueta indicara que es de otra región española con más fama, seguro que su puntuación se elevaría minimo en 3 o 4 décimas.

Mi más cordial y sincera enhorabuena a Roberto y Alfonso por su labor en esta bodega.