Porque es un básico descomunal, que puede crecer y crecer, pero con un tiempecito degollado, es una pasada.

Nariz fresca, llena de cítricos y flores blancas, con esas notas de lías, de pastelería, de toallita de limón y suaves anisados. Notas salinas y marinas, minerales, de matorral, de miga de pan, herbáceos, sutiles balsámicos... Es un no parar. 

La boca tiene una acidez afilada, una burbuja integrada y esos toques cítricos y de pera de agua. Pastelillo de limón, vainilla, mentolados y miga de pan te hacen sonreír, con esas notas salinas y minerales que te llevan al Nirvana. Largo, fresco, floral y mineral, con esos toques frescos balsámicos y suaves anisados. 

Crecerá y crecerá y mucho placer nos dará.

Un champagne básico fabuloso, que con el tiempo me ha parecido con una mejoría extraordinaria. Degorgé el 1-19, muy equilibrado, con buenísima RCP, suave, redondo, muy fresco, con notas cítricas, su agradable amargor y las notas minerales. Muy largo y muy agradable y sabroso, no sólo como aperitivo, sino acompañando una comida. Genial

Amarillo pajizo. Burbuja densa y cremosa.

Afilado y todavía muy joven. Cáscara de limón, anís, pimienta negra y caja de cerillas. Recomiendo tomarlo algo más caliente de la cuenta o nos perderemos ciertos matices.

Boca apretada, con una acidez brutal y unas elevadas dosis minerales, algo parecido a chupar piedras es lo que sentimos con cada sorbo. El alcohol y la madera sabemos que están ahí por las indicaciones de la Bodega, porque ni están ni se les espera. El paso es fresquísimo, cada trago limpia el paladar e invita a seguir bebiendo.

Postgusto de intensidad media-alta que deja recuerdos cítricos y punzantes.

Radical. Procede de siete fincas situadas en la Côte des Blancs y el Valle del Marne. Elaborado en biodinámica. Perfecto para empezar a conocer el estilo de la Casa.

Porque menudo champagne adictivo! La Meunier se nota en primer plano y es tan fresca!!!!!

La burbuja es de pequeño tamaño pero abundante, resaltando sobre un fondo dorado. La nariz es tremendamente fresca y mineral, con flores, cítricos suaves, fruta blanca y de hueso, notas de masa pastelera, de miga de pan, herbáceos suaves, mentolados, notas de matorral, suaves anisados, ahumados, horno de panadería... Y sobre todo.. FRESCURA!

La boca no iba a ser menos, con unos amargores y una acidez marcada, afilada. Hay mineralidad a raudales, flores, fruta blanca y de hueso, notas de panadería, anisados, herbáceos, balsámicos, matorral, cítricos... Tiene un postgusto muy largo y perfumado, en el que destacan la mineralidad y los cítricos.

Tremendo CHAMPAÑAZO. Una gozada y que está en pañales aún. Un par de años de botella le darán un toque tremendo, pero ahora su frescura le hace adictivo!

Un champagne básico, equilibrado, con buena RCP, de color amarillo dorado con buena burbuja abundante. En nariz aromas a fruta blanca, notas cítricas y notas minerales. En boca es suave, con buena persistencia y un carbónico bien integrado, recuerda a panadería. Notas cítricas y un agradable amargor. Lo compré en Alavole y lo probé después del Hure Freres Invitation. Éste último me pareció más equilibrado.