Visual: amarillo dorado pálido pajizo, limpio, brillante y de buena lágrima.

Nariz: de buena intensidad a fruta cítrica (lima y limón), fruta blanca de hueso algo madura, pomelo, notas minerales, hierbas aromáticas, balsámico-mentolados, laurel, flores blancas y ligerísimos toques de anís. Muy complejo y de bastante intensidad.

Boca: entrada de ataque frutal y fresco, cítrico, de alta acidez, afilado, cítrico y sabroso, densidad media, buena estructura y cuerpo, untuoso y cremoso, muy agradable en el paso por boca. Final largo, con fruta blanca madura amargosa, cítricos, anisados, herbáceos y mentolados en un retrogusto fresquísimo y rico, y con una retronasal fantástica con flores blancas, balsámicos, anís, monte bajo y más fruta blanca y a piel de lima que lo redondean estupendamente bien.

Tercera botella disfrutada de este fantástico albariño con casi 6 años, con alta acidez y todavía muchos años de vida en botella.

Otra botella con corcho de aglomerado que hace perfectamente su función y huele muy bien.

Sacamos algo frío de la nevera pero dejando oxigenación de hora y pico y que gane algo de temperatura empieza a darnos cosas...

Visual: amarillo dorado pálido que aún se observa brillante y joven (no aparenta más de 5 años en un blanco joven), limpio, brillante y de cierta lágrima.

Nariz: aromas de buena intensidad a fruta blanca de hueso madura (melocotón, paraguayas), también potentes aromas cítricos a lima, limón maduro y pomelo, herbáceos (hinojo, tomillo), anisados, balsámicos, notas a laurel y flores blancas ya no muy frescas (pero tampoco marchitas, al menos en esta botella). Buena nariz, muy primaria aún, con ciertos detalles que denotan algo de edad pero, en general, mucha fruta madura y buena complejidad. No parece ser un blanco joven de más de 5 años (aunque recordemos que, la variedad albariño, da vinos sin madera muy longevos dada su elevada acidez y sus particulares características).

Boca: ataque fresco, cítrico, frutal, ligeramente afilado y sabroso, de muy buena acidez (elevada), volumen medio, buen cuerpo y estructura para un blanco joven, con cierta expansividad, ligera untuosidad y agradable paso por boca (cremoso y con ligerísimas notas que recuerdan a bollería y mantequilla en el mismo). El final es bastante largo, gustoso, goloso, con fruta blanca de hueso, cítricos, amielados. mentolados y herbáceos en retrogusto y con una retronasal estupenda con notas a más frutas blanca y cítrica, flores blancas, balsámicos, anisados y notas a monte bajo. Muy buen final.

Segunda botella probada de este albariño con más de un lustro que está en un momento de consumo excelente pero que, tranquilamente y bien conservado, puede aguantar otro lustro más en botella. La RCP me parece excelente para el precio pagado.

Botella bordelesa fina y alargada. Etiqueta y contraetiqueta modernas y llamativas en colores amarillo y dorado. Cierre de aglomerado de corcho de buena calidad (dentro de lo que es el aglomerado) no muy bañado en vino y que huele muy bien a fruta blanca por el interior.

Visual: amarillo dorado pajizo con reflejos oro nuevo, limpio, brillante y con buena lágrima abundante de rápida caída.

Nariz: de buena intensidad a fruta blanca y cítrica fresca pero ya con un buen toque de madurez, manzana madura, potentes flores blancas y amarillas ya algo marchitas, laurel, notas herbáceas y minerales, algunos mentolado-balsámicos, tarta de crema, notas cremosas y de ligera vainilla y, de nuevo, ramo de flores ya algo marchita (que recuerda ligeramente a las flores de cementerio pasados unos cuantos días) junto a notas a iglesia, sacristía y algo de incienso. Buena complejidad y todavía frescura con notas nada características de albariños más jóvenes (con 1-2 años no hay nada de todo esto).

Boca: ataque fresco, seco y suave a fruta blanca y algo de cítrica con buena madurez. Buena estructura, cuerpo y peso para su tipología (albariño joven), densidad media-alta que va un poco a menos del ataque al recorrido, afilado pero ya bastante domado a la vez. Conserva muy buena acidez aún. Paso por boca algo cremoso/untuoso con recuerdos herbáceos y ligeros mentolados muy agradable. El final es ácido-dulce-amargoso y de notable longitud y frescura, con retrogusto bastante cítrico, frutal (fruta blanca), notablemente mineral, a herbáceos, sutil hinojo, regaliz, balsámico-mentolados junto al laurel y las flores marchitas en la retronasal que terminan de redondearlo muy bien e invitan a otra copa.

Albariño joven de 12.5%, con 5 años de edad ya y que, todo hay que decirlo, está muy bueno, fresco, sabroso, complejo en nariz y también en boca, con muy buena acidez. Desconozco si tiene trabajo de lías ó algo de barrica... sospecho que lías sí pero barrica no (y si la tuviera sería muy fugaz en cuanto a tiempo).

Excelente vino en su tipología con un lustro ya. Para vivir fácilmente otros 4-5 años más sin problemas si es bien conservado.

La albariño es una pasada de variedad porque permite evolucionar a sus vinos de una forma fantástica en la botella. Su PVP normal ronda los 12-14€ pero yo en una oferta de una conocida web, lo he podido conseguir con más de un 70% de descuento, es decir, a menos de 4€ la botella. Un auténtico chollo propiciado porque mucha gente ya no compra vinos blancos jóvenes con 5 años pensando que "están pasados, viejos, caídos",... sí, sí, sí, dejádmelos a mí en ese caso, vosotros seguid con vuestros aburridos "vinos del año" que yo disfrutaré de estos vinos de mucha más calidad (y con la crianza en botella ya hecha) a precio de derribo :)

Incluso a su PVP normal me parece un vino de RCP excelente. Me quedan 5 botellas más... lo seguiremos en el futuro ;)

PD: Una nota. A las casi 2 horas del descorche (y mantenido en recipiente térmico), el vino está aún mejor, más intenso en nariz y con más notas de todo. Quizás convenga en otra ocasión decantarlo para que se oxigene todavía más: la temperatura se podría mantener metiendo el decantador en una cubitera (por ejemplo) y dejando que el vino servido gane algunos grados durante su estancia en copa.