Restaurante Lakasa de César Martín en Madrid
Restaurante Lakasa de César Martín
País:
España
Provincia:
Localidad:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:
Vino por copas:
Precio desde:
21,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
47 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.7
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
7.4
Comida COMIDA
8.0
Precio medio entorno ENTORNO
7.3
RCP CALIDAD-PRECIO
8.2
Foie con trufa
Paloma torcaz asada con su jugo y aroma de vandouvan, cebollitas glaseadas y boletus edulis(media ración)
 Revolconas Adolfo con mollejas de ternera,,sobre la base de un taco de panceta crujiente y setas (media ración)
 Lubina salvaje en laminado y cruda con aderezos de especia de Roellinger (cúrcuma, pimienta y algas).
Coca de setas y sofrito con papada (media ración)
Carpaccio de boletus y amanitas (media ración)
Buñuelitos de Idiazabal (media ración)
Tabla de quesos de Antony
Carpaccio de bonito
Raya con migas y miso rojo
Lakasito
Royal de liebre
Steak tartar
El Bosque Goloso
Vieira a la brasa y pez mantequilla con lardo di colonnata
Terrina de foie caramelizado kasero con tostas
Opiniones de Lakasa de César Martín
OPINIONES
45

es la tercera vez que como en Lakasa y si bien no es un descubrimiento gastronómico está todo bien preparado, diría limpio, que recuerdan la cocina vasca, con sabores nítidos y sin sobrecarga y a un precio más que razonable. Bien el ajoblanco con anacardos y la hamburguesa y fantásticos el pez mantequilla con una especie de tocino; la ensalada de rekeson y los tagliatelles.
Surtidos de panes muy bueno y una botella de guitian (19.50).
Lo mejor tres 70 euros...no se puede pedir más.
Para colmo hacen un esfuerzo inmenso porque se esté a gusto y, si bien se pasan un pelín de amabilidad para mi gusto, lo consiguen.
Para comer en un sitio bonito...bien y a buen precio este es el sitio.
(sabiendo lo difícil que es eso en madrid)

Estábamos por la zona y recordé los comentarios de foreros sobre este local (siempre llevo Verema en la cabeza), así que llamé con poca antelación -45 min.- y reservé mesa sin problema. Comida para dos adultos y una peque.
El local es agradable y ya bien descrito por foreros que lo han visitado. Destaca la zona de entrada a los aseos, decorada con mucho gusto.
En cuanto a las mesas, están algo faltas de separación, los mantelitos individuales dan un aire informal pero correcto, la vajilla, cubertería y cristalería correctas, modernas sin estridencias.
Desde la recepción la amabilidad fue la nota predominante, todo el personal nos mimó y fueron encantadores con la niña.
Calmamos la sed de 40º con botellas de agua y nos trajeron pan de tres tipos, rico, con un pequeño bol de mantequilla y un platito de chistorra, detalle de la casa.
La carta no es extensa pero ofrece platos bien escogidos con la opción en todos ellos de medias raciones, yo diría que es una variante, sencilla pero muy satisfactoria, a los menús degustación de otros locales de más fuste.
Nos tomó la comanda Marco, nos dejamos aconsejar pero le pareció buena nuestra primera elección, así que comenzamos con
- 1/2 Buñuelitos de Idiazábal. Suaves y sutiles.
- Filetes de anchoa "¡¡Sin aplastar!!", como reza en carta, anchoa correcta, servida con finas láminas de pan crujiente y su mojo de tomate suave.
Para la peque:
- 1/2 Pizza de setas. Masa excelente, fina y crujiente, bien cubierta de setas y aderezos.
Para los "moz@s":
- Hamburguesa de ternera de Guadarrama, cortada a cuchillo, aliñada con yema y acompañada de Dijon, "ketchup casero", muy suave, y pan de aceite. Excelente calidad de la ternera y el acompañamiento.
- Milhoja de rape y calabacín. Buena calidad, el rape un pelín falto de punto pero muy buena armonía con el calabacín y una tapenade que siempre agrada.
Elegimos para postre:
- 1/2 Helado de chocolate. Correcto.
- 1/2 Buñuelos chocolate. Correctos.
- 1/2 Tabla de quesos. Excelente calidad y presentación. Marina detalla con conocimiento y elegancia tanto las variedades como los acompañamientos. Un paseo de siete variedades por Francia, Suiza y España. Para acompañar, gotitas de compotas de frambuesa y pera, membrillo artesanal y frutos secos cubiertos de curry. Una delicia. Más detalle de la tabla de quesos en el blog de Lakasa.
Por si fuera poco, dejo a Marco la elección de un vino que cumpla con los quesos. Me ofrece un Palo Cortado 30 años de Bodegas Tradición. Placer de dioses. Para colmo la copa de Tradición fue invitación de la casa. Después comenté con César Martín que Luis Gª de la Navarra me ofreció un amontillado de la misma bodega con una tabla de quesos. César comentó que "es que Luis sabe mucho".
La carta de vinos me pareció bien elegida pero corta en referencias. Precios entre x1.5 y x2 los de tienda. Elegimos un Dr. Burklin Wolf Ruppertsberger 2009 (éste muy ajustado, 24.00 €) que acompañó la comida a la perfección. Dado a probar, cubitera, bien servido, rellenados y sobre todo Marco interesándose por si era de nuestro agrado y por nuestra opinión sobre la carta de vinos.
Rematamos con un capuccino y un espresso, acompañados de un bizcochito.
En mi opinión el café es mejorable, me pareció de un sabor demasiado agresivo y amargo, quizá por su variedad.
La conversación con César Martin fue amena y reveladora, hablamos de la situación del sector, pasado y presente, de setas y hongos, con capítulo aparte para unos boletus que le acababan de llegar, frescos y hermosos, que piensa preparar "con una ligera plancha, una yema y una trufa de verano italiana". Me pareció increíble (tuve que sacar fotos), que en estas fechas haya semejante género (sierra de Madrid, 1.900 m. altitud, últimos días de fresco y alto grado de humedad)
Resumiendo, esta es una dirección con muy buen concepto para los tiempos que corren, cocina notable y un servicio de sala digno de restaurante de altos vuelos, lo que premio subiendo a notable alto la nota de entorno (esto es plagio de los foreros "placeados", je je).
Total pagado de todo lo citado más 2 botellas de agua de 0.5, 113.70 €. En el precio por persona, como es habitual, descuento la parte de la niña (cubierto, pizza y postre) y divido entre los 2 adultos.
Perdonadme la extensión pero es que "me embalo"...

Ante los dos comentarios anteriores, nos decidimos por conocer este nuevo local, llevado por el chief César Martín, con experiencias diversas en casas ajenas (Arce y Don Giovanni) y propias (La Abacería de la Villa).

Cuando entras te encuentras en un restaurante con barra, dando un aire muy jovial y moderno. A la izquierda un pequeño saloncito con apenas cuatro mesas negras para apenas un docena de personas. Suelo de madera muy oscura y paredes de color gris ceniza pero ambiente muy luminoso (la luz de la calle lo impregna todo).

Carta no muy amplia, pero con productos bien escogidos de temporada. Precios muy comedidos. Se agradece el poder pedir de todo por medias raciones. Elaboraciones modernas y presentaciones cuidadas. Vajilla y cubertería de líneas modernas, aunque la cristalería deja un poco que desear.

Servicio llevado por parte de jóvenes con muchas ganas de hacerlo bien. Los tiempos del servicio se llevó adecuadamente (a pesar de ponérselo muy difícil en la comanda) y cambiando los cubiertos constantemente. Mención especial se merece la maitre, Marina, una francesa de la Bretaña que se desvive en la sala ofreciendo pasión, simpatía y atenciones por doquier. Hace las veces también de sumiller.

Comida para tres personas:

Cestita de panes variados (todos muy buenos) y como detalle de la casa, un platito con chistorra.

Por un lado, para mi mujer y chaval:

- Cecina de buey wagyu: Nos lo cambiaron, previo aviso, por jamón de buey. Aderezada con aceite de almendras y pimienta. Bien aunque un poco justa la ración.

- 1/2 de buñuelos de idiazábal: Media docena de buñuelitos con bechamel muy ligera, muy esponjosos y con nítido sabor a queso de oveja.

- Salmorejo clásico con huevo y jamón: Muy cremoso y de sabor no muy intenso pero agradable (sin duda buenos tomates).

- Pizza Tumaca: Pizza de base muy fina y crujiente, con tomate natural, ajo y generosas lonchas de buen jamón.

- Arroz cremoso con setas y terrina de foie: Arroz meloso y en su punto con foie casero y ligeramente fundido. Bien a secas.

De postre:

- Buñuelos de chocolate fundentes con sorbete de frambuesa. Muy buenos según el chaval.

- Panna Cotta de pimienta rosa de Sichuan. Muy ligera y refrescante, aunque pasó casi desapercibido el sabor a pimienta.

Para mí, el menú de atún rojo que consistió de:

- Ensalada de ventresca escabechada: Muy buena la ventresca, preparada en casa según me comentaron. Se acompaña de hojas de diferentes tipos de lechuga.

- Carpaccio de toro con aceite de aceituna kalamata. Apenas percibí sabor.

- Tataki con salmorejo y con un aliño de aceite de frutos secos tostados. Me dejó un tanto indiferente el sabor, de nuevo un tanto anodino.

- Pizza de atún con piquillos y berros: Para mi lo mejor del menú. Delicada la masa, fina y crujiente, cubierta con carpaccio de atún.

- Tartar con guacamole: Picado a cuchillo con un aliño muy suave con cebolla roja, cebollino, pimienta rosa y mostaza de Dijon. Muy bueno también.

- De postre, fresones con nata casera (muy ligera) y ralladura de naranja: Ni fu, ni fa.

Carta de vinos más bien cortita pero bien asesorada. Se echan en falta más vinos blancos y cavas o champagnes. Hoy promocionaban los vinos de la finca Regajal. Precios no muy abusivos. Tomamos Gramona Imperial Brut Gran Reserva 2006 (25€ inc. IVA) servido correctamente de temperatura y en cubitera. Atentos a rellenar. Copas discretas de diseño moderno (Summa).

Al final nos ofrecieron un par de copitas de Carte d'Or 2010, vino dulce de Chenin Blanc (Coteaux du Layon AOC). Desgraciadamente muy subidito de temperatura para disfrutarlo adecuadamente.

Agradable conversación con César Martín, transmitieno raudales de ilusión por esta nueva aventura. Esa pasión se merece una buena dosis de suerte.

Precio total: 146.40€ (inc. IVA, cava, cubierto a 1.50€ por persona, dos botellas de agua de medio litro a 1.50 unidad, dos refrescos a 2.50€, 1/3 de mahou a 2.50€.

Nota: El precio por persona indicado es lo que estimo que costaría comer en este local con IVA y sin bebidas.

Había pasado alguna vez por la puerta,decidimos reservar ayer para cenar.Echando un ojo a su página web me parecía que contaba con los suficientes atractivos como para ir a conocerlo.

Llamé por la mañana para reservar y solo quedaba una mesa alta con taburetes,pero me dijeron que antes de las 2 confirmarían reservas y en caso de haber alguna baja podríamos acceder a una mesa normal.Cuando se produjo esa llamada unas horas más tarde nos confirman la mesa inicial a la que accedí sin problemas.

A eso de las 10 nos presentamos y acomodamos en la mesa ya comentada donde nos entregan las cartas de la comida y la bebida.

Toda la carta tiene la posibilidad de pedir medias raciones con lo que se puede saborear una mayor cantidad de platos.

Para beber pedimos un André Clouet Reserve que tienen en carta a 38€.

Cuando ya nos habíamos decidido a pedir la comida y habiendo pasado 10 minutos desde que solicitamos la bebida nos comentan que no les queda André Clouet,con lo que pedimos un Gramona III lustros a 25€.A los 5 minutos de esto nos traen los primeros platos que consistían en vieras con pez mantequilla y vinagreta de tomate y yo pido el menú de atún que están promocionando estos días y que consiste en: ensalada con ventresca asada,carpaccio de toro con olivada,tartar de atún con guacamole y wasabi pizza co atún y pimiento ,tataki con salmorejo y fresa con espuma de nata por 35€ luego opinaré sobre dicho menú.

Bien pues como iba contando con los primeros en la mesa no nos habían ofrecido el pan y el cava tuvimos que reclamarlo tres veces más hasta que ya nos dimos cuenta que lo que estaban haciendo era intentar enfriarlo cuanto antes, porque lo tenían caliente.

Una vez pasado estos momentos de "desajuste" y de pedirnos disculpas mi acompañante se había pedido tartar de atún.Bien pues estuvo esperando otros 30 minutos hasta que lo trajeron con lo que el ritmo de la cena se partió totalmente.

La decoración es moderna,con las mesas bastante juntas,cristalería,vajilla y cubertería moderna.Lugar lleno hasta los topes y creo que en pleno período de rodaje (lleva abierto 4 meses) con personal voluntarioso aunque al menos ayer desbordado.Tuvimos ocasión de saludar a César y comentarle nuestras impresiones.

La carta creo que está conseguida a unos buenos precios,con una buena ejecución y materias primas.El menú del atún está bien aunque sería mejor subirlo 10€ por ejemplo y que el carpaccio de toro fuera eso toro y no tres trocitos de lomo,y poner una mayor cantidad de tataki.

Para finalizar tomamos un buñuelo cremoso de chocolate con sorbete de frambuesa y dos copas de Pedro Ximenez, a las que fuimos invitados.

Creo que es un lugar con posibilidades,que cuando ajuste esos pequeños pero molestos fallos de coordinación,puede ser un referente en la gastronomía madrileña.

Tiene una gran cantidad de vinos por copas con unos precios ajustados y una carta muy aceptable en espumosos y champanes.

Volveremos a darle otra oportunidad

El precio total fue de 105€ los dos.

Fecha visita: 24 Mar 2012 (2 pers)

Hay sitios en Madrid, no tan populares como los grandes consolidados o los superModa, que son una pasada y que amplían la diversidad gastronómica de la ciudad de forma importante, este es el caso de Lakasa, pero también de Surtopía, LUA, o Viavélez por decir algunos sitios extraordinarios que no están superPetados (aunque algunos de éstos ya están recogiendo los frutos de su buen trabajo)

Así que después de intentar reservar en algunos de nuestros asiáticos preferido en Madrid, y no ser posible comer en ellos un sábado a mediodía, decidimos que ya era hora (después de su apertura hace unos meses) de visitar el local de Cesar Martín

Cesar es un cocinero muy experimentado para ser tan joven, ha estado con Iñaki Camba (el gran histrión :)) del que aprendió la mano maestra para la caza, además estuvo en Balzac y después montó su propia trattoria, así que ha creado una carta con platos de todas sus influencias: mercado, caza, italiana... y el resultado es grandioso! Se nota que hay un gran cocinero detrás, todo está muy bueno!

Además pensamos que es uno de los sitios más redondos en donde hemos estado últimamente, se aprecia que han analizado la situación socio-económica actual y se ha intentado proporcionar algo que va como anillo al dedo para los tiempos que vivimos, me explico:

- Todos los platos pueden ser pedidos por ½ raciones; a Olivia y a mi con esto ya nos tiene ganados porque nos encanta poder probar muchas cosas como ha sido el caso, ¿por qué no le siguen otros sitios?

- El precio está muy ajustado, probar caza, pasta casera o toques personales a ingredientes tradicionales como el arroz o los mejillones, es un autentica maravilla por ½ raciones con un rango entre 5 y 12. Respecto al tamaño de los platos (relacionado con el precio) podríamos decir que las ½ raciones son adecuadas para comer/cenar en plan degustaciones

- Su increíble participación digital, presente en redes sociales, blog propio, actualizaciones continuas en facebook, por supuesto la WEB tiene la carta con los precios: genial!

Si a esto añadimos que la jefa de sala es diligente y encantadora y que Cesar te toma la comanda, es muy majete e incluso si te da baza puedes intercambiar impresiones gastronómicas con él... pues es un placer!

Si acaso un poco más de espacio entre mesas no estaría nada mal, sobre todo las de 2, además otra cosilla ha sido que entre la primera ½ ración y la 2º ha habido unos 10 min de espera, en fin, cosillas que no han empañado para nada la experiencia general

Qué pedimos?

-- Aperitivo, cubierto y servicio de pan: 3
Pan blanco, de centeno y de Uvas, sin aperitivo previo, barato si tenemos en cuenta que nos cambiaron unas 4 veces de platos y cubiertos a cada uno

-- Degustación croquetas de calÇots y buñuelitos de Idiazabal: 6
Fantásticas ambas cosas, de lo mejor, deliciosas las croquetas y suaves y sabrosos los buñuelos, imprescindibles!, pedimos ½ de cada cosa y Cesar nos dijo que nos iba a integrar las dos medias en una y poner algo menos ya que pensaba que habíamos pedido mucho

-- ½ Mejillones de Bouchot al vapor: 7
Muy ricos, pequeños pero sabrosos, la cebolla le daba muy buen punto, mojando en la salsita y con la cebollita te podías comer una barra :)

-- ½ Tagliatelle con torreznitos, cherry y crema de berenjenas: 5,50
Brutales, pasta en su justo punto, riquísimos, de lo que más me gusto a mi de la comida

-- ½ Arroz cremoso con pato azulón y setas: 8,50
Muy muy rico, un risotto bien preparado y coronado por el pato que le daba potencia al plato y lo giraba respecto al otros risottos más convencionales

-- ½ Pichón asado en su guiso: 15
Estuvo bien pero esperábamos otra cosa, o quizás íbamos con la idea de un asado convencional, la cama del guiso de higaditos del propio pichón y pasta estaba muy rico, a mi me gustó, pero digamos que no es algo que le guste a todo el mundo

-- Postres: Pedimos 3 ½ postres! :) PannaCotta de pimienta de Sechuan 3,50 - Tartita de requesón y mermelada de violetas 4,50 y Buñuelos de chocolate 5
Los buñuelos nos gustaron más que el resto, de los otros nos quedamos con las violetas y la pimienta (no pudimos fotografiar los 2 últimos, nos pudo el ansia :))

-- Bebidas: Tercio Mahou 2,50, 2copas de Rueda (Basa‘10: frutas tropicales, dulce) 4,60 CocaK 2,50 2copas de Barbazul’09 (potente, 15º) 5
(Precios contenidos)

Precio Total: 74,10

Conclusión: Comida muy rica, ½ raciones en toda la carta incluidos postres, precios contenidos en comida y copas de vino, pizzas, abierto para desayunos, wifi gratis, actuaciones en directo, una sala para tomar una copa en plan relax, el cocinero te toma nota y es majo, servicio diligente, abre los sábados a medio día :P… uffff ¿se puede pedir más? Sí: disfrutar al llegar a casa de la última temporada y fin de serie del 'El sequito (Entourage)' :))

Nota 8,7

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