Poco que añadir a comentarios anteriores;local,servicio,trato....todo fantástico.En esta ocasión nos decidimos por pedir el menú de mediodía(23)compuesto por un aperitivo-salmorejo-dos entrantes-clochinas valencianas y la "afamada"ensaladilla de marisco.Como principal,optamos por un sabrosísimo arroz seco de pollo de corral y setas.Como quiera que uno de los comensales retrasó su llegada,pedimos un buen plato de jamón y una croquetas de cocido-muy ricas-así como unos montaditos de tartar de atún.De postre,uns deconstrucción de la horchata con fartons,que,sin duda,fue lo más flojo del ágape.De bebercia un par de botellas de Numanthia.RCP correcta.

Ya se está convirtiendo en una costumbre el visitar Kaymus con asiduidad. Analizada con tranquilidad la última velada consideramos que han avanzado un nuevo escalón. Rara vez encuentras un fallo. No vamos a descubrir la calidad de la sus platos, con productos de primer nivel atrevidamente ensamblados de manera perfecta, ni su interesante y bien confeccionada carta de vinos, ni ese cómodo y agradable entorno, pero si quiero ensalzar el trato que disponen al cliente el cual es inmejorable. Ese trato discreto y a la vez tan cercano, esa coordinación entre los componentes del equipo, ese saber escuchar, ese saber argumentar, ese buen humor. Cuando todo esto se conjuga el éxito está garantizado, y eso es lo que estan labrando con un gran trabajo bajo la humildad.

Esta vez tomamos:

- Salmorejo con aceite de Jabugo y piñones.
- Ostra con tapinambour y helado de manzana verde y apio.
- Ensalada de salazones y encurtidos.
- Colmenillas rellenas de crema y foie.
- Kokotxas de merluza con crema de ajos confitados, molleja de ternera y jamón ibérico.
- Hamburguesa de lomo alto de buey.

- Tarta de queso fresco y leche cuajada.
- Nuestra versión de la horchata con fartons.

- (2) Cafés.

Bodega:

- (2) Vermuth Perucci.
- (2) copas de Champagne R de Ruinart.
- Clos Martinet 2005.
- (2) copas de Vino dulce Ordoñez nº1.
- (2) copas de Riesling J.J.Christoffel.

Ganar un cliente no es tarea fácil y mantenerlo menos. Con nosotros ya lo habeis conseguido. Gracias por la nota personalizada.

Un saludo.

Llevaba mucho tiempo queriendo ir a Kaymus, ya que sabemos que Nacho es muy buen cocinero. Y la verdad es que no nos hemos sentido defraudados. El sitio es precioso y la comida espectacular. Y si todo esto no es una buena razón para ir, os doy otra; relación calidad- precio, de lo mejor que he visto en Valencia. El menú degustación muy acertado.

2 ª visita en un mes.

Restaurante bien acondicionado con distancia suficiente entre mesas. Muy buenos todos los detalles y elementos de sobremesa. Excelente la atención del personal de sala hacia el comensal.

Tomamos (2) menú degustación semejante al mencionado en el comentario que me precede, con alguna ligera variación. Muy bien la textura, cocción y sabor de todos los platos servidos. Maridamos dicho menú con un Aalto adecuadamente servido y con la temperatura correcta. Notable la carta de vinos y licores. Sin duda uno de los grandes actualmente en Valencia.

Nota:

- (2) Servicio de mesa: 4 €.
- (2) Menú Degustación: 90 €.
- (2) Vermouth Perucci: 6 €.
- (1) Aalto (2006): 38 €.
- (2) Cafés: 4 €.
- (2) Copas de Moscato D'Asti: Invitación.

Total: 151,94 €.

Un saludo.

Nueva visita para degustar la cocina de Nacho ya que dos de los comensales todavía no la connocían.Estupendo menú,bien servido y bien comido:
Aperitivo:Crema de colmenillas con piñones y aceite de ibéricos.
Entrantes:Ostra al gin con pepino/milhojas de foie y manzana
Tartar de atún con aguacate
Vieira con mollejas y royal de alcachofa
Pescado: Romerete(parecido al mero,de las costas malaguñeas),jugoso.
Carne: Cabrito relleno de verduras envuelto en bacon/Hamburguesa de lomo alto de buey.
Postres: Pastel de queso con azúcar caramelizado.
Pianono con helado de vainilla.
De bebercia tres de Ruinart R.Crevezas,cafés...Todo a un alto nivel.Un acierto!!

De lo mejor que hay hoy en dia en Valencia. No me extendere mucho....como no destacar la ostra al gin-tonic de la acertada decision de pedir el menu degustacion. Sin duda volveremos.

Poco más que añadir al comentario de Almolo puesto que tomamos el mismo menú. Menú degustación de altura donde todos los platos tuvieron un gran nivel, desde los entrantes hasta los postres. Por destacar algún plato me quedo con los "pulpitos de playa con crujiente de papada y habitas" o el "chipirón relleno de blanquet", donde descubrimos la maestría de Nacho de hacer platos de mar y montaña. Olvidaros de aires, espumas, gelatinas, esferificaciones en Kaymus, aquí se viene a comer un buen producto, bien elaborado y bien acompañado. Servicio de sala muy profesional y amable, rozando la perfección.

Nueva visita al Kaymus esta vez para probar el menú degustación y poder apreciar la cocina de Nacho Rodero en su máxima expresión.
El menú está formado por 1 aperitivo, 5 entradas, pescado, carne y 2 postres:
-Gazpacho con aceite de jabugo y piñones
-Ostra al Gin Tonic de Hendricks
-Milhojas de fioe caramelizado
-Tartar de atún con ajoblanco y crema de aguacate
-Chipirón relleno de blanquet
-Pulpitos de playa con crujiente de papada y habitas
-Vieira con molleja y royal de alcachofa
-Corvina salvaje con crema de ajos confitados y jamón ibérico
-Presa ibérica con piña caramelizada, tofe de platano y queso azul
-Torrija cítrica caramelizada, con sorbete de fruta de la pasión y mermelada de violetas
-Sopita de chocolate con browni, pera caramelizada y sorbete de coco
Combinaciones muy pensadas y sin demasiados ingredientes, ni alardes técnicos y en los que destaca fundamentalmente la materia prima.
Todos los platos estuvieron a un gran nivel y me costaría destacar alguno de ellos, quizás me quedaría con los platos mar y montaña (curiosamente casi todos), por lo bien que están conjuntados la carne y el pescado.
Tanto el servicio del vino como la carta son excelentes, al igual que las copas.
Maridamos el menú con Ekam Riesling Coster del segre, que nos llamó la atención por sus acentuados toques cítricos, un bercial reserva para la carne y un moscato d'Asti para los postres.
El servicio de sala, prácticamente perfecto, muy amable y atento durante toda la comida y con una adecuada espera entre plato y plato.
Desconozco el precio final ya que fuí invitado, por lo que pongo solamente el precio del menú degustación
En definitiva un restaurante que seguramente acabará convirtiéndose en una de las referencias gastronómicas de Valencia.

Visita a Kaymus jueves santo a mediodía.
El restaurante es amplio, está decorado con buen gusto y la distancia entre las mesas es adecuada aunque cierto es que el restaurante estaba 1/3 de ocupación y eso influyó en que la sensación de comodidad fuera mayor.
Optamos por el menú mediodía, que aunque no refleja la cocina de este restaurante en toda plenitud, sobre todo la parte más creativa, sí que sirve para hacerse una idea de lo que se elabora.
Este menú consta de apertivo, 2 entradas, un arroz a elegir y postre a 23€
Empezamos con una sopa de cebolla, una versión particular en forma casi de crema con muy buen sabor y acompañadas de un huevo de codorniz pochado.
Continuamos con:
-Carrilladas de merluza: estaban rebozadas y tenían como acompañamiento tomate confitado y alioli. Buenas aunque el alioli algo salado para mi gusto
-Ensaladilla rusa, versión de este plato típico que en la mayoría de los casos me resulta aburrido, esta vez acompañado de un salpicón de gambas que le daba un interesante sabor a marisco y un toque agrio. Excelente
-Rossejat de fideos finos con verduritas y unos tropezones de jamón ibérico que conseguían darle un toque diferente. Perfecto el punto de los fideos y un sabor no excesivamente sustancioso.
De postre tarta de queso con caramelo que estaba buena pero algo simple. Se lo podían haber currado algo más.
El servicio de sala fué perfecto. Sin esperas excesivas y trayendo todos los platos a la vez.
Nos llevamos la grata sorpresa de encontrarnos a Ivan ex-Torrijos, un profesional como la copa de un pino, que creo que va a aportar mucho a este restaurante.
La cuenta final, sumándole 2€ del servicio de mesa y el IVA (¿por qué no se lo añaden todo directamente al precio del menú?) se acercó a los 30€ sin vino, un poco excesiva quizás para un menú de mediodía.

Estuvimos en este restaurante el pasado 13 de marzo y mis sensaciones fueron muy positivas, aún habiendo una despedida de soltera por lo cual nos pidieron disculpas, ellas estaban en el reservado y no eran muy escandalosas, gracias a dios.

Bueno para cenar elegimos el menú degustación que consiste en 2 aperitivos, 3 entrantes, pescado, carne y dos postres, depende lo comedor que seas puede ser excesivo, yo lo disfrute de buena gana, a destacar la ya conocida ostra al gintonic y las manita gratinadas, si tuviera que elegir me quedaria con estos dos.

Para beber nos decidimos por un Clos Martinet 2005, nos sorprendió gratamente.

La atención fue muy buena en todo momento, nos invitaron dos copas de Tantum Ergo (2007) para acompañar la ostra y una copa de Msocato d'Asti todo un detalle.