Restaurante Ca Sento - CERRADO en Valencia
Restaurante Ca Sento - CERRADO
País:
España
Provincia:
Localidad:
Dirección:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
63,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
Domingos, lunes y mes de agosto
Nota de cata PRECIO MEDIO:
79 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
7.2
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
7.5
Comida COMIDA
8.2
Precio medio entorno ENTORNO
5.2
RCP CALIDAD-PRECIO
6.4
Opiniones de Ca Sento - CERRADO
OPINIONES
63

Tras la curiosidad del reconocido lugar y su famosa reputación en las guias gastronómicas me lanzo con los ojos cerrados a esta CARA y apresurada aventura. Para empezar el lugar es una joya en un cubo de basura, al entrar es como si de repente te encontraras en la dimension desconocida;lugar de diseño que para mi humilde opinión han fallado en la elección del techo y del mármol en las paredes que dan un toque un tanto fúnebre. Después del shock visual me veo envuelto por los olores que se mezclan (en mi ropa) y me dejo recomendar el menú de la casa: Excesivo en su precio pero aun así me doblego ante el renombre antes dicho. Nada fuera de lo normal; muy de diseño, super minimalistas sus platos y muy soso, la carta de vinos bien aunque a la hora de pedir corres el riesgo que por casualidad se haya agotado!!!! Mi consejo: no os dejéis llevar por las falsas impresiones, os puede salir muy CARO.

La primera vez me trataron fatal y la comida fue buena pero carísima. Y el olor del comedor era idéntico al que debía haber en la cocina. Pero la segunda vez ha sido mucho peor el trato, el olor a mezcla de comidas todavía más fuerte y, la cena de los seis que fuimos, escasa, de buena calidad y con un precio absurdo para un lugar en el que te tratan como si te estuvieran haciendo un favor y en el que no han gastado nada en evitar esa melange de olores. Si quieren ir de restaurante de primera, que se den una vuelta por los que de verdad lo son y aprendan

Por mi experiencia y lo que he leido, da la impresion de que en Ca Sento no es lo mismo ir recomendado que de profano. Me explico, en mi primera visita (previa a la reforma) nos trataron fatal en Sala, y pese a que la materia prima era excelsa, la cena resulto muy decepcionante, por la cantidad, la falta de simpatia y el precio. Todo cambio hace dos miecoles, cuando fui con un cliente, amigo personal de Raul y sus padres. El restaurante sí me parecio agradable, minimalista pero muy coqueto, algo zen. Nada más entrar nos presentan a Raul y nos invita a pasar a la cocina, nos enseña la sala y la bodega, que es brutal. Da la impresion de estar ensimismado en cocinar, en buscar producto, dandosele una higa lo que suceda en el exterior. Por cierto, lleno hasta la bandera, y no solo el dia que fuimos (¡¡¡nos recomendaron no ir de jueves a sabado porque estaban saturados!!!). La comida fue memorable. Crujiente de parmesano con nota de limon (maravilloso), anchoa servida con su espina caramelizada (sorprendente y gratisima), buñuelo de bacalao (esponjoso, sabroso), gamba de Denia hervida (dos por barba, para qué más) y calamar plancha con aro de cebolla hecho en su propia tinta (sabrosoooo). Para seguir canelones de careta de cerdo y ceps (similares a los de Albacar, realmente ricos) y el rossejat de fideos, fantastico. Todo regado, de principio a fin, por Henri Giraud Rose Millesime (la carta de champagne espectacular, la de vino de altisimo nivel, aunque con mucho "recargo" en el precio, ad exemplum, casi 30 euros una botella de Baltasar Gracias que vale 5 en bodega y 7 al distribuidor). Para rematar, de postre una torrija que en mi vida. Cafes. A las 16:30 Raul se despidio ¡¡¡porque iba al mercado a comprar!!!! Me invitaron, asi qe poco puedo decir del precio. Estimando que el champagne esté en unos 120 euros la botella (bebimos 2), es una comida de 150 euros por persona sin bajar del autobus. Conclusion, la comida es insuperable y tienen el mejor producto, pero falta cercania. Sin duda, mejor ir con alguien conocido. Tambien parece que le ha hecho flaco favor la publicidad negativa de cierto critico gatronomico que no le pago al dueño el festin de la presentacion de su libro. En fin, volvere en breve con mi señora, que esa no perdona una.

Vista la crítica anterior cuesta un poco rescatar lo positivo del restaurante, en especial si mi cena parece que coincidió en el día con la del compañero anterior. Nosotros eramos una mesa con 15 comensales a menú y vinos ya reservados( pudo influir). El trato fue excelente, en especial por parte de la sumiller que se tomó todo tipo de molestias e interés por hacernos disfrutar de la comida y st de los vinos. Servicio correcto, aq es verdad que con algunos despistes. Servicio del vino excelente, copas Riedel adecuadas a cada variedad( hubo 6 vinos distintos, explicados y comentados). Es un restaurante fundamentalmente de producto, con excelentes cocciones y puntos de ejecución. Nuestra cigala a la sal estaba maravillosa, sin duda.Sin valorar cada plato del menú, debo destacar dos cosas. Me hubiera gustado algo más de creatividad o consistencia en los entrantes( algunos me resultaron pobres como el foie o buñuelo de bacalao).Por otra parte, el arroz con costra, la almeja con espuma de limón y como decía la calidad del género y su ejecución me resultaron excelentes.Quizá no cumplió mis expectativas en cuanto a que podía ser un restaurante por encima de lo que la Michelín o algunos críticos creen. Tampoco me gustó el local , ni por dentro ni por supuesto por fuera.Parece que es irregular en la comida y en el servicio, pero desde luego me pareció un gran restaurante, con oficio y capacidad para hacer las cosas de forma sobresaliente.

El local es minimalista, pero feo a rabiar, fijense el el techo y sufran las olores de la cocina "a la vista".
De entrada, ni aperitivos de cortesia.
En la carta tras pedir tres platos, que no tenian, finalmente nos recitan lo que no tienen (los tres y cuatro mas). El vino Pago de Señorans, esupendo, porque solo lo abrieron, no lo sugirieron y lo mal sirvieron (las copas permanecian vacias a menudo). En los primeros destaca la escasez de racion. Gambas de Denia (solo 2) y crudas. La langosta (de nuevo, minima racion, ni tan siquiera 1/6 parte del ejemplar en cada plato). De los postres solo se salva la Tabla de quesos (francamente bien). Y de nuevo, mal en los vinos de postres y mal (por inexistentes), las golosinas que suelen acompañar al cafe.
El servicio, nada profesional, incluso nos obsequieron con alguna mirada y ademan nada correcto, al pedir solo una bola de helado de postre.
Yo no volvere a pagar estos precios por NADA.

Sorprende el contraste entre la calle donde está situado y las características del restaurante, de categoría. Ya me explicaron que los propietarios nuenca habían querido abandonar el emplazamiento original, cosa que veo respetable. A mí la decoración no me gustó en su minimalismo, pero eso es muy subjetivo. Distancia entre las mesas muy holgada, mantelería de muchísima calidad, lo mismo que cubertería y platerío. Hicimos un especial de aperitivos de primero rayando los 5 platillos a gran nivel. El segundo fue en mi caso un pargo para chuparse los dedos. Varios de los comensales no habían ni oido hablar de este pescado y les encantó. Los que tomaron mero no quedaron tan satisfechos. Los postres no desmerecen de lo anterior. Surtido de panes y degustación de aceite muy bueno.La atención de la sumiller buena, en consonancia con una excepcional carta de vinos, con mención especial para los champanes. Lástima que estos elogios no puedan ampliarse al resto del servicio. ¡Un poco más de simpatía por favor!. A mí no me resulta agradable que me sirvan un plato con "cara de palo", o que discutan a media voz detrás mío unos camareros con otros. Como algún miembro del grupo no había llegado todavía le solicité a una de las camareras la carta, para irla estudiando. Todavía la espero. Hasta que no estuvo la mesa completa no la trajeron. Si la norma es esa se me explica y no pasa nada. Pero dar la callada por respuesta,...Otro aspecto negativo en mi opinión son los olores provenientes de la cocina abierta al público, que inundan el local. En fin, creo que mis expectativas eran demasiado grandes. Algunos detalles, exigibles a mi parecer a un restaurante de esta categoría y este precio, bajan la valoración.

Lo mejor la calidad de la materia prima...¡DE PRIMERA!
La carta de vinos muy buena.

Desde la última reforma(hace 3 años).Reforma moderna, fria y desangelada, me recordo a las peliculas del espacio.
Como hacia tiempo pedimos men degustación( dos personas). Amplio, ocho platos y dos postres. No defrauda, producto excelso(gambas de Denia) de diez, tecnica en la elaboración, temperatura de los platos, sabores, texturas muy conseguidos.No obstanteme he quedado un poco despagado, no he notado un avance en el menu. Me ha parecido poco arriesgado. Asi como el magret de pato con quinoa y confitura de higos y el foie con pure de manzana y brioche no me han convencido, quiza por la confitura de higos y por el brioche.
El servicio de sala muy bueno con personal preparado.Te ofrecen distintos tipos de pan y aceite, siempre atentos y rapidos. La cristaleria Riedel y servicio del vino bueno. Nos aconsejo Champagne Françoise Hemart Grand Cru muy correcto, fresco, aromatico y con cuerpo. Vino Domaine Larue Les Murgers des Dents de Chuen 2002 primer Cru (de Saint Aubin) que no desntono para nada y muy bien de precio ( 45 €). No obstante la pequeñita decepeción restaurante muy recomendable.

Quien dijo que Ca Sento tiene sorpresas? yo las sorpresas las busco en restaurantes como el bulli. en Ca Sento se va a comer gambas cigalas percebes espardenyas pescado etc.. es decir el mejor producto de Valencia y logicamente se paga y la sorpresa si es que la buscas es comerlo fresco y bien cocinado. yo como se donde voy y que voy a comer (que es lo que le falta saber a muchos) siempre salgo satisfecha.

Era la primera vez que visitaba este restaurante al que hacia tiempo que queria visitar.en cuanto a la comida tengo que decir que no me sorprendio ningun plato eso si el producto es excelente y como de un restaurante de ese nivel bien cocinado.el servicio del vino correcto por poner un pero la copa de agua no esta a la altura del restaurante.En definitiva me esperaba ser sorprendido un poco mas por la cocina.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar